La primavera meteorológica de 2023, que abarca los meses completos de marzo, abril y mayo, ha sido la más cálida de la serie histórica comenzada en 1961, ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). También ha sido la segunda más seca, sólo superada por la primavera de 1995, y, pese a las intensas lluvias de la segunda quincena de mayo, España continúa en una situación de sequía meteorológica.
En cuanto a temperaturas, aunque el balance del mes de mayo ha resultado “normal”, marzo fue el segundo marzo más cálido de la serie histórica y abril el primero de su serie. El resultado es una primavera “extremadamente cálida”, con una temperatura media en la España peninsular que supera en 1,8 ºC el promedio del período de referencia 1991-2020 y en 0,3 ºC a la primavera más cálida hasta ahora, que fue la del año 1997, explica la agencia estatal.
En el archipiélago canario, esta primavera también ha sido extremadamente cálida, con casi dos grados (1,9 ºC) sobre la media de 1991-2020, mientras que en las islas baleares la calificación es de “cálida”, con menos de un grado sobre el periodo de referencia.
En cuanto a las precipitaciones, las acumuladas en la España peninsular son un 53,1% de las habituales en el período de referencia. “Tan sólo la primavera de 1995 (...) fue más seca que la de 2023 y son los únicos casos, desde al menos 1961, en que no se llegan a acumular como mínimo 100 l/m²” en esta época del año, indica la AEMET.
En Canarias, la primavera ha sido “muy seca” (ha precipitado un 12,6% de lo normal) y en Baleares, “seca” (con un 59,5% de precipitaciones con respecto a lo normal). De nuevo, la falta de lluvias en marzo, abril y la primera mitad de mayo ha hecho de la primavera la segunda más seca de la serie pese a los continuos chubascos que se produjeron en el territorio peninsular y Baleares durante la segunda quincena del mes.
Con esta situación, la primavera no ha acabado con la sequía meteorológica (falta de lluvias) que comenzó en el invierno 2021-2022 ni con la sequía de larga duración (que depende de las precipitaciones de los tres años previos) que comenzó a finales de 2022, concluye la AEMET. En Maldita.es hemos explicado cuáles son los tipos de sequía y hemos dado herramientas y fuentes para informarse sobre este fenómeno. También hemos explicado qué indicadores se utilizan para evaluar el estado de la sequía y activar restricciones al consumo de agua.
Sobre el verano meteorológico, que comenzó el 1 de junio, la AEMET estima que hay entre un 50 y un 60% de probabilidades de que sea más cálido de lo normal en la península y un 70% en los archipiélagos, con un 10 a 20% de probabilidades de que sea más frío de lo normal. En cuanto a las precipitaciones, por el contrario, existe una probabilidad de entre el 40 y el 50% de que estén por encima de lo normal, frente a un 20-25 % de que estén por debajo. Estas probabilidades excluyen al Cantábrico y Canarias, donde no hay una tendencia clara.