El Ramadán es el mes en el que la población musulmana ayuna desde el amanecer hasta el ocaso como un ejercicio de espiritualidad y autodisciplina. En 2024, se prolongó desde el 11 de marzo hasta el 9 de abril.
Muchos de los contenidos que se difunden alrededor de este mes tienen que ver con la extranjerización del Islam. Se asume que la población musulmana es necesariamente migrante, pero los datos muestran una realidad diferente. En España, los musulmanes representan el 5% de la población y de estos, el 45% tienen nacionalidad española, según el Estudio Demográfico de la Población Musulmana 2023, elaborado por la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) y el Observatorio Andalusí.
Otras de las narrativas que desde Maldita.es hemos detectado en relación con el Ramadán son que “los musulmanes reciben pagas por Ramadán” o que “los colegios eximen a los niños de ir a clase durante el Ramadán”. Las ausencias al trabajo o a clase durante el mes del Ramadán, así como todas las demás cuestiones relativas a la comunidad musulmana, están reguladas por el Acuerdo de Cooperación del Estado con la Comisión Islámica de España, aprobado en 1992.
El Ramadán es el mes del ayuno, la espiritualidad y la autodisciplina para las personas musulmanas
Entre el 11 de marzo y el 9 de abril de 2024, la población musulmana de todo el mundo ha practicado el mes del Ramadán, el noveno del año musulmán. Chaimaa Boukharsa, filóloga licenciada en estudios árabes e islámicos, cofundadora de Afrocolectiva y activista decolonial, cuenta a Maldita.es que, durante este periodo, se conmemora la revelación del Corán al Profeta por parte del ángel Gabriel.
La Comisión Islámica de España define a Maldita.es el ayuno del Ramadán como “uno de los cinco pilares del culto en el Islam que se practica durante 29 o 30 días, desde el alba hasta la puesta del sol”. Así, las personas musulmanas eliminan el consumo de alimentos o bebidas, pero también “la inhalación de humos, las relaciones íntimas y las palabras malsonantes”.
Chaimaa Boukharsa añade que el Ramadán va más allá del simple ayuno: “Está lleno de una profunda espiritualidad, es un mes de autodisciplina para convertirse en una mejor persona”. También dice que “permite controlar los deseos e impulsos, recordándonos que no siempre podemos tener lo que deseamos”.
Sin embargo, el ayuno durante el Ramadán tiene excepciones. En el Corán se puede leer que “el que esté enfermo o de viaje, podrá hacerlo [el ayuno], en igual número, otros días. Y los que pudiendo ayunar no lo hagan o interrumpan su ayuno, que alimenten, como exención, a unos pobres”. La ONG Islamic Relief señala en su página web que, en la práctica, esto implica que aquellas personas que debido a condiciones puntuales (embarazo, lactancia, enfermedad, etc.) no puedan ayunar, podrán compensarlo recuperando los días de ayuno antes del próximo Ramadán. Por otro lado, aquellas personas que debido a una enfermedad crónica o avanzada edad no puedan ayunar ni recuperar los días, podrán compensarlo a través de una limosna o dando de comer a una persona necesitada, proceso conocido como fidyah.
Tras finalizar el mes de Ramadán, empieza el mes siguiente, Shawwal, y el primer día se celebra el Eid al-Fitr, comida que simboliza el fin del ayuno. En 2024, esta celebración es el 10 de abril.
El Acuerdo de Cooperación del Estado con la Comisión Islámica regula las interrupciones del trabajo o estudio durante el mes de Ramadán
Durante el mes del Ramadán 2024, han surgido en redes sociales algunas narrativas sobre las personas musulmanas, como que no trabajan durante el ayuno o que los niños están exentos de acudir a clase.
En España, todo lo relativo a la comunidad musulmana está recogido en el Acuerdo de Cooperación del Estado con la Comisión Islámica Española, aprobado en 1992. En su artículo 12, recoge la posibilidad de que, durante el mes de Ramadán, los trabajadores musulmanes soliciten la interrupción de su trabajo los viernes de 13.30h a 16.30h, además de poder concluir la jornada laboral una hora antes de la puesta de sol. Sin embargo, quienes se acojan a este derecho deberán recuperar posteriormente las horas no trabajadas.
Por otro lado, el texto también señala que los alumnos musulmanes que así lo deseen puedan faltar a clase y a exámenes durante las horas de rezo de los viernes de Ramadán y el día del Eid al-Fitr, fiesta del fin del ayuno, como ya contamos en Maldita.es.
La desinformación extranjeriza el mundo musulmán y lo iguala con el árabe
Según el Estudio Demográfico de la Población Musulmana 2023, elaborado por la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) y el Observatorio Andalusí, los musulmanes representan el 5% de la población de España, y de estos, el 45% son españoles. A pesar de estas cifras, la Asociación Marroquí para la Integración de Inmigrantes señala que algunas de las narrativas desinformadoras que rodean el Ramadán en redes sociales están vinculadas a la extranjerización del Islam, como que una persona española no puede ser musulmana o que el Islam no es español.
Ante esto, Chaimaa Boukharsa dice a Maldita.es que “el Islam es una espiritualidad y no una nacionalidad” y dice que ”el problema es que siempre se cree que el musulmán es árabe”. Señala también que esta “visión occidental homogeniza lo musulmán y lo árabe”, lo que se traduce en “más prejuicios, estereotipos, generalizaciones y esencialismo cultural”. Además, añade que “el Islam constituye y forma parte del legado andalusí peninsular y autóctono, más allá de la narrativa islamófoba que pretende extranjerizarlo”.
Por otro lado, en Maldita.es también hemos detectado diferentes narrativas en torno al Ramadán durante las últimas semanas. Una de las más recurrentes es la que dice que las personas musulmanas reciben pagas especiales durante el mes del ayuno, pero es un bulo. La desinformación sobre estas ayudas económicas también incluyó la manipulación de un vídeo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el que, supuestamente, anunciaba la concesión de estas pagas a las personas marroquíes, también desmentido por Maldita.es.
