Las elecciones del 14-F han arrojado un Parlament que estará formado por ocho partidos distintos, una cifra récord. Pero si en las elecciones catalanas no se hubiera aplicado la barrera electoral de llegar como mínimo al 3% de los votos para optar al reparto de escaños, los partidos con representación serían nueve. Los mismos ocho (PSC, ERC, Junts, Vox, En Comú Podem, CUP, PP, PDeCAT) y también el PDeCAT, que hubiera conseguido dos escaños por Barcelona.
Los dos escaños que irían para el PDeCAT los perderían PSC y ERC. Por lo tanto, estas dos formaciones empatarían como primera fuerza con Junts per Catalunya: las tres con 32 diputados. En las provincias de Girona, Lleida y Tarragona el reparto de escaños no cambiaría al eliminar la barrera electoral.
Con circunscripción única y sin barrera electoral el PDeCAT entraría con tres diputados
Una de las normas de la ley electoral española es que los partidos deben llegar al mínimo del 3% de los votos en las circunscripciones donde se presenten para poder optar a escaños. Esta barrera electoral se aplica también en las elecciones catalanas, ya que Cataluña es la única comunidad autónoma sin ley electoral propia. El PDeCAT se quedó con el 2,51% de los votos en la provincia de Barcelona, la circunscripción que reparte más escaños, y por ello no lograron representación parlamentaria.
En cambio, si los partidos hubieran tenido los mismos votos, no hubiera existido la barrera mínima para el reparto de escaños y, además, hubiera habido circunscripción única, el PDeCAT hubiera conseguido tres escaños y el PP hubiera tenido dos más de los que ha obtenido.
En Comú Podem, por su parte, subiría de los ocho escaños a los nueve y se colocaría como quinta fuerza. Este 14-F fueron quinta fuerza en número de votos, pero sexta en escaños, ya que les adelantó la CUP. Con el sistema de circunscripción única y sin barrera electoral empatarían con nueve diputados para cada partido. Ciudadanos también hubiera tenido un diputado más pasando de seis a siete sillones en el Parlament.
Estos siete escaños que sumarían a sus cuentas PDeCAT, PP, Ciudadanos y En Comú Podem los perderían ERC y Junts per Catalunya. La candidatura de Pere Aragonés bajaría de 33 a 30 diputados y la de Laura Borrás de 32 a 28. El PSC afianzaría, por lo tanto, su puesto como primera fuerza, aunque se mantendría en los 33 escaños que ya ha obtenido.
Con una barrera electoral del 5% como la de Madrid, Valencia o Galicia el PP hubiera salido del Parlament
Si en lugar de una barrera electoral del 3% como la que se aplica en Cataluña el umbral mínimo de votos hubiera sido del 5% como sucede en Baleares, Cantabria, la Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, La Rioja o la Comunidad de Madrid, la principal diferencia en los resultados electorales sería que el Partido Popular hubiera quedado fuera del Parlament. La lista de Alejandro Fernández sólo obtuvo el 3,85% de los votos.
Con el cálculo realizado por Maldita.es, teniendo en cuenta la barrera electoral del 5% y con circunscripción única, Ciudadanos y En Comú Podem habrían ganado dos escaños más y PSC y CUP, uno cada uno. Además, ERC hubiera perdido uno y Junts per Catalunya, dos.