En las últimas semanas se está difundiendo desinformación sobre supuestos contagios de coronavirus en comercios locales de diferentes puntos de España. Como siempre os decimos, algo tan sencillo como reenviar una cadena de WhatApp puede afectar de forma directa a la vida de otra persona y a sus trabajos o negocios.
Los mensajes de WhatsApp sobre el cierre por coronavirus de locales de Badajoz
Es el caso del bar Orellana de Badajoz. Su propietario, Agustín Jaramillo, recibió hace unos días una llamada de un conocido avisándole de que se difundían en grupos de WhatsApp unos mensajes que advertían de que su bar cerraba por coronavirus:
''Hola, a los de Badajoz, no vayais de bares, extremar las precauciones, poca calle. Rebrotes importantes en Badajoz. Estamos con aumento importante del trabajo, con llamadas en cola como no pasaba ya hace tiempo''
''Chachioo... Están cerrando bares en Badajoz por coronavirus.... Aparte de la cafetería en Plz. Santo Domingo, el Orellana y Chat Noir.... Cuidadin q se nos cuela el bicho''
"Llamé inmediatamente a la Policía Nacional y me dijeron que es muy difícil llegar al punto de partida de un mensaje reenviado", explica Jaramillo a Maldita.es. Decidió entonces llamar a medios de comunicación locales para parar el rumor lo antes posible, como a Hoy y Badajoz directo.
Jaramillo afirma que su clientela habitual sigue yendo al bar y que incluso algún vecino se ha acercado a raíz de leer la noticia en los medios. "Pero es un plato de mal gusto, no sabes por qué alguien se inventa mentiras, no lo entiendo", manifiesta.
El club y sala de conciertos Chat Noir de Badajoz también ha sido el objetivo de esta desinformación. Por eso, en su perfiles de Facebook e Instagram aclararon que estaban todos bien y que el local sí estaba abierto. Con un cartel con la frase "Aprende a identificar un bulo" negaban el rumor:
"Nadie sabe quién los lanza, pero quien sea perjudica a los negocios. Nosotros no lo hemos notado mucho porque fuimos rápidos y los hemos distribuido [los carteles] entre nuestros clientes. Pero también es cierto que podía haber pasado lo contrario porque les están metiendo miedo a la gente", dijeron desde Chat Noir a Hoy.
El supuesto positivo por COVID-19 de una cocinera de un restaurante de Sotogrande (Cádiz)
Una historia similar es la del restaurante Bunker Beach Club de Sotogrande (Cádiz). Se difundió por redes sociales que una de sus cocineras supuestamente había dado positivo en COVID-19.
"Las acusaciones no son verdaderas, no tenemos ninguna cocinera que haya dado positivo en el test de Covid-19, ni tenemos ninguna cocinera trabajando en nuestro establecimiento. Aún así, después de ver las acusaciones, para que estén seguros de que nuestro espacio está libre de Covid-19, se han realizado tests a todos los trabajadores y todos los resultados han sido NEGATIVO", han explicado desde su perfil de Facebook.
Además, piden que se pare de compartir la desinformación: "Está afectando a nuestro negocio donde nos dejamos la piel todos los días para ofrecerles el mejor servicio posible".
La desinformación sobre el cierre de una peluquería de Vivero (Galicia) donde dio positivo una trabajadora
A Raquel González, que tiene una peluquería en Vivero (Galicia), también le ha afectado una desinformación de este tipo. Según denuncia en su perfil de Instagram, se compartieron mensajes que decían que la policía le había cerrado la peluquería tras el positivo por COVID-19 de una compañera. "Eso es todo falso. Lo ideal es que si todos aplicáramos el sentido común igual ni saldrían esas mentiras", manifiesta en la publicación.
En declaraciones a La Voz de Galicia, Raquel explica que estuvieron 14 días de confinamiento desde que la trabajadora dio positivo. "Llegaron a decir que la policía me había cerrado la peluquería, cuando era mentira, o que mi marido y yo estábamos contagiados, cuando también es mentira, y eso hace mucho daño", asegura.
El supuesto rebrote en un mercado de Algeciras
A finales de junio, en Algeciras (Cádiz) también se difundieron por redes sociales mensajes sobre un supuesto brote de coronavirus entre los comerciantes del Mercado Ingeniero Torroja y el propio Ayuntamiento lo tuvo que negar.
"Se trata de una desinformación maliciosa y los ciudadanos pueden contar con sus mercados para realizar su compra diaria con total seguridad", rezaba el comunicado.
La historia de Jaki y su mujer, comerciantes chinos de Totana que fueron víctimas de un bulo sobre el contagio del virus
Ya en el inicio de la pandemia os contamos el caso de Jaki, comerciante chino de Totana (Murcia) que fue víctima de la desinformación cuando a un vecino de la localidad se le ocurrió difundir un mensaje en el que decía que su mujer acababa de regresar de Wuhan (China) y estaba en cuarentena por el coronavirus.
Según cuenta él mismo, estaba en su tienda cuando un vecino entró para contarle que estaba circulando ese bulo en el que, además, se pedía que nadie fuera a comprar a su comercio ni a otros regentados por ciudadanos chinos. Jaki explicó que él y su mujer proceden de un lugar situado a casi 1.000 kilómetros de Wuhan y que la difusión del bulo podía perjudicar tanto a su familia como a su negocio y al resto de la comunidad china.
Después de que el mensaje circulara por los WhatsApp de todo el municipio, alguien descubrió la identidad del desinformador, quien horas después tuvo que salir a dar declaraciones ante los medios de comunicación para pedir disculpas y aclarar que ese mensaje que en un primer momento había enviado a una sola persona era mentira.
Si no estás seguro, no compartas
Hay veces en las que la desinformación, sobre todo aquella que circula en momentos de crisis o que trata temas sensibles, pone en serio riesgo la integridad de sus víctimas. De hecho, en Maldita.es ya os hemos contado varios casos en los que los bulos tuvieron consecuencias letales para esas personas.
Por ello, la próxima vez que vayas a difundir un mensaje sé responsable y piensa si es real o si te la están intentando colar. Ten en cuenta que en el momento en el que decides compartir un contenido por WhatsApp pierdes el control sobre él, aunque sólo se lo hayas enviado a tu círculo más cercano.
También puedes dar un paso más y alertarnos mandando un WhatsApp al 644 229 319 si sospechas de algo que te han enviado porque, juntos, es mucho más difícil que nos la cuelen.