MENÚ
MALDITA TECNOLOGÍA

Qué son y cómo funcionan las autodenominadas "agencias de ‘streamers'"

Publicado
Claves
  • Se llaman a sí mismas “agencias de streamers” y son quienes captan en redes sociales a las chicas que aparecerán en las aplicaciones de videollamadas a cambio de contenido erótico y explícito
  • Les prometen que tendrán “horarios flexibles”, “multiplicarán” sus ingresos en criptomonedas y recibirán “muchos regalos”, pero no especifican las condiciones laborales ni comprueban su edad
  • En Maldita.es hemos hablado con responsables de dos de estas agencias
Comparte
Recursos utilizados
Hablar con la fuente involucrada
Expertos
Fuentes oficiales (comunicados, bases de datos, BOE)
Material producción propia

“¿Quieres generar hasta 400 dólares semanales siendo streamer? Quédate en este vídeo que es para ti”, señalaba una chica en su perfil de TikTok. “Trabaja conmigo como streamer para que no te falte nunca el dinero”, decía otra. Así es como las autodenominadas “agencias de streamerstratan de captar nuevas chicas en redes sociales como Instagram o TikTok para que trabajen haciendo videollamadas en las que se ofrece contenido “erótico y explícito” a demanda del usuario que paga por él.

Decenas de interesadas en los vídeos, que no mencionan que el “trabajo” incluye contenido sexual

Que el trabajo incluya contenido sexual es algo que no se menciona en estos vídeos. El resultado a las promesas económicas llega rápido: las publicaciones se llenan de comentarios de chicas que piden más información o directamente empezar a trabajar como streamers, atraídas por la posibilidad de recibir regalos y ganar dinero de forma sencilla.

Fuente. Comentarios en una publicación de TikTok en el que se habla de los beneficios de ser “modelo streamer”.

El papel de estas supuestas agencias, que en su mayoría no tienen página web y que funcionan solamente a través de perfiles en redes sociales, es facilitar la entrada en las apps donde se realizan las videollamadas. Ofrecen a las chicas la posibilidad de “conocer nuevos amigos y chatear con personas de más de 190 países” a cambio de dinero (una publicación que ya no se encuentra disponible). Si aceptan, trabajarán como “modelos streamer”.

El término streamer se utiliza habitualmente para referirse a las personas que hacen transmisiones en directo en redes sociales, jugando a videojuegos o charlando con sus seguidores, como Ibai Llanos o The Grefg. Ese no es el caso de las “modelos streamer, que se dedicarán a participar en videollamadas a cambio de dinero. Su jornada se extenderá, dicen, entre “6-8 horas” al día haciendo videollamadas “con contenido erótico y explícito +18”. A cambio, les prometen ser “independientes”, tener “horarios flexibles”, “multiplicar” los ingresos cada semana y recibir “muchos regalos”. Un trabajo que, aseguran, les va a hacer “salir de la pobreza”. 

Maldita.es ha hablado con las propietarias de dos de estas “agencias”. Tras interesarnos por la posibilidad de hacernos streamers, hemos pedido información sobre la constitución legal de la empresa o los contratos que supuestamente firman con las chicas, pero no hemos obtenido respuestas sobre esto. Ambas aseguraron trabajar con cerca de 600 chicas de distintos países, la mayoría de Venezuela y Colombia, aunque, de nuevo, no aportan pruebas que permitan corroborarlo

Los ingresos de las streamers en criptomonedas pueden oscilar, de nuevo según la palabra de estas personas y sin aportar forma de corroborarlo, entre 500 y 700 dólares a la semana, dependiendo de la cantidad de contenidos y videollamadas que generen durante ese tiempo. Cuánto más contenido, mayor será el beneficio. Los ingresos de la agencia, en cambio, dependerán de los porcentajes que hayan pactado con cada aplicación, que puede ir, aseguran, desde el 5% hasta el 20%. Maldita.es tampoco ha podido verificar esto.

Las “agencias de streamers” fichan chicas para apps de videollamadas en las que hay contenido sexual

Cientos de perfiles se presentan en redes sociales como “agencias de streamers”, sobre todo, en plataformas como Instagram o TikTok. Presentes en múltiples países, como España, Venezuela, Colombia o Chile, se dedican a intermediar entre las aplicaciones de videollamadas y las chicas que trabajarán en ellas. Las streamers crearán y ofrecerán allí, a cambio de dinero, contenidos durante las conversaciones que mantienen con los usuarios de la app, y que, en muchos casos, acaban siendo, a demanda del usuario, sexualmente explícitos.

La agencia Prima Donna lo define así: “Una modelo streamer gana dinero por transmitir en vivo lo que desee: juegos, conversaciones, hablar con personas de cualquier parte del mundo. También, recibe dinero por recibir videollamadas, e incluso regalos”. La agencia Aymar Brisa Agency lo define como “una persona con la capacidad comunicativa y tecnológica que realiza transmisiones en a una audiencia específica” y detalla que “en nuestras plataformas se ve el contenido explícito +18”. 

En las agencias de streamers hay dos perfiles, las CEO –como las dueñas de las agencias se denominan a sí mismas– y las administradoras. Dos de estas CEO han explicado a Maldita.es que, en este esquema, la agencia se encarga de las finanzas, los pagos, los contratos y el contacto directo de las streamers con los dueños de las aplicaciones, mientras que las administradoras –elegidas por las dueñas– serán quienes estén en contacto directo con las streamers: gestionan su ingreso en las aplicaciones, se encargan de su aprendizaje, de sus pagos cuando alcanzan los objetivos establecidos y, también, de su motivación.

Su objetivo principal en redes sociales es “reclutar” a chicas –de entre 18 y 39 años– para que se unan a su agencia. Para ello, usan como gancho vídeos de TikTok e Instagram en los que hablan de su propia experiencia o de las ventajas que tendría trabajar como “modelo streamer”. Las agencias incluyen entre los beneficios el ser “independiente tu sola” o una posibilidad de obtener dinero “si eres mamá soltera y no te alcanzan los ingresos”. “Ya no es necesario que descuides a tus hijos o salir de casa y no saber cómo te los puedan tratar”, señala la agencia Aymar Brisa Agency. 

Fuente. Aymar Brisa Agency. 

Maldita.es ha contactado con las dueñas de dos de estas agencias (en la mayoría de los casos detrás de estos perfiles hay mujeres), que aseguran que ellas mismas empezaron trabajando como streamers. Ninguna nos ha querido aportar documentación sobre la constitución legal de sus agencias.

Julmileth Illas, dueña de Lollypop’s Agency, cuenta que creó su propia agencia hace apenas un año y reconoce que para hacerlo se necesitan “contactos que te den más contactos dentro del mundo streamer”. Contactos entre los que destacan los dueños de las aplicaciones de videollamadas

La persona detrás de Candy Agency, que no ha dado su nombre, relata que también fue streamer durante dos años y que, poco después, creó su propia agencia: “Sentía necesidad de ayudar a que más chicas se unieran porque a mí me ayudó a mejorar mi vida”. Menciona también que tener contacto directo con los dueños de las aplicaciones fue básico para ponerla en marcha, ser “primordialmente” mayor de edad y “más que necesario” tener más de 30 chicas dispuestas a trabajar en la agencia.

¿Cuántas chicas trabajan en estas aplicaciones y cuánto cobran?

La CEO de Candy Agency aseguró cuando la contactamos, sin ofrecer pruebas, que contaba con más de 100 chicas trabajando para ella en cada una de las seis aplicaciones con las que trabaja, lo que suponía ya en ese momento más de 600 chicas; a día de hoy pueden ser muchas más. Según explicó, gran parte de ellas son de Venezuela y Colombia, aunque también hay de España, Chile, Brasil o Puerto Rico, entre otros países. Lo mismo ocurre en el caso de Lollypop’s Agency, según su CEO. 

Para que las chicas puedan trabajar en la agencia, explican, deben responder a una serie de preguntas, como su nombre, país de origen, edad o su número de teléfono. En teoría, deben también enviar su documento de identidad para probar que son mayores de edad, aunque reconocen que se han podido dar casos en los que no se ha producido esa supervisión. 

Maldita.es ha contactado con estas agencias simulando ser chicas interesadas en ser streamer y ha comprobado que esta solicitud no se ha producido en ninguno de los dos casos. Desde Maldita.es hemos llegado hasta la capacitación para darnos de alta en las apps –proceso en el que se piden todos los datos y se verifica la identidad, según aseguran las propias apps/agencias–, pero no hemos llegado a formalizar una relación con ninguna agencia, ni tampoco hemos llegado a registrarnos en las aplicaciones como streamers para ofrecer contenido.

Las directoras de ambas agencias señalan que las “buenas streamers” pueden ganar más de 1.000 dólares al mes. Las chicas “top” –aquellas con más ganancias–, pueden facturar de 500 a 700 dólares en una semana. La agencia Prima Donna asegura que las chicas pueden establecer sus propias metas y que si trabajan con “carisma y calidad” podrán ganar hasta 2.000 dólares al mes. Las streamers recibirán el dinero a través de criptodivisas para que “no se devalúe el dinero en la moneda local”. La más usada y recomendada por las agencias es Binance. Pero hay trampa: las chicas podrán cobrar solo cuando alcancen la meta que les impongan sus administradoras en monedas virtuales. Por lo tanto, no cobrarán nada hasta que no lo alcancen.

¿Qué relación legal/laboral rige este negocio?

¿Qué tipo de relación laboral tienen las agencias con las streamers? Aunque en sus vídeos y mensajes hablan de un “trabajo”, Maldita.es no ha podido comprobar que exista un contrato laboral ni de ningún otro tipo, ya que las administradoras no lo mencionan en ningún momento y tampoco hablan de las condiciones laborales, más allá de exigir una dedicación diaria de 8 horas y establecer que el pago se hará a través de criptomonedas.

Las autodenominadas agencias a las que hemos podido preguntar sí aseguran tener un contrato que regula su relación con las aplicaciones a las que proporcionan chicas. En el caso de Candy Agency, la fundadora afirma haber registrado de forma legal los cinco contratos que tiene con las aplicaciones en España y Venezuela con un “acuerdo de anclaje” o Cooperation Agreement on anchor Operation and Management, por su nombre en inglés. Maldita.es solicitó ver esos contratos pero nunca los hemos recibido. 

Este tipo de contrato está regulado en España por la Ley 12/1992 de 27 de mayo, según señala a Maldita.es el abogado laboralista Juanan Salmerón. El agente, explica, es quien se dedica a realizar actividades comerciales para terceros sin asumir el riesgo de esas actividades.

Adrián Todoli, doctor en Derecho, explica a Maldita.es que este tipo de contrato se usa con mucha frecuencia. En vez de contratar vendedores, se selecciona a referentes en un barrio y ellos son los que venden. Los agentes a su vez van teniendo otros a su cargo y consiguen que estos vendan por ellos. De esta forma, los de arriba se dedican a manejar equipos. En este caso, las apps de videollamadas delegan en las agencias la selección de las chicas que trabajarán para ellos y las CEO de las agencias delegan, a su vez, en las administradoras.

¿Cómo se financian las “agencias de streamers”?

Las agencias, aseguran sus CEO, se nutren de “las comisiones” que las aplicaciones les dan cada vez que introducen a una nueva streamer. Estos porcentajes varían en función de la plataforma de videollamadas y pueden oscilar entre el 5% y el 20%. “No se cobra del dinero que gana la streamer. No les descontamos ningún porcentaje de su salario. Solo se les cobra tres dólares por el coste del envío del dinero a las casas de cambio”, señalan. Además, aseguran que generalmente las streamers ganan más que la propia agencia, algo que desde Maldita.es no hemos podido comprobar de manera independiente.

Antes de confiar en una de estas ‘agencias’ hay que asegurarse de que ofrecen datos públicos y de contacto 

Ninguna de las dos agencias analizadas, Lollypop’s Agency y Candy Agency, tiene página web, sino que trabajan desde sus perfiles de Instagram y desde sus canales de Telegram, donde ofrecen información a las chicas que quieren trabajar como streamers. Por lo tanto, carecen de una política de privacidad o de un aviso legal

Jose Antonio Rodríguez, periodista, analista y maldito que nos ha prestado sus superpoderes, señala que no debemos confiar en “ninguna agencia de lo que sea” que no te facilita un teléfono para llamar o una dirección física a la que poder ir a tener una entrevista. “Si hay un teléfono debemos llamar. Si hay una dirección y tienes la posibilidad de ir, ve, pero nunca solo. No confíes a ciegas y no compartas absolutamente ningún dato, ninguna foto, ningún vídeo antes de tener claro con quién estás hablando”, subraya Rodríguez.

¿Qué diferencia hay entre una “agencia de streamers” y una de ‘influencers’?

Ser streamer –como se conoce a las personas que hacen transmisiones en directo– se ha convertido en el sueño de muchos adolescentes a causa del éxito de perfiles como el de Ibai Llanos, que acumulan millones de seguidores en sus redes. Sin embargo, como te decíamos, no debemos confundir a este tipo de streamers con lo que se conoce como “modelo streamer, que es el término con el que las llamadas “agencias de streamers” se refieren a las chicas con las que trabajan.

Rodríguez explica a Maldita.es que las agencias de influencers son el equivalente “a los managers de los artistas”, que velan por los intereses de sus clientes. Sin embargo, las “agencias de streamers” son, a su juicio, “un reclamo oportunista” que no busca talento, sino atraer a un gran número de usuarios.

Para ello, señala a Maldita.es José Luis Albi, maldito y especialista en marketing digital y social media, han adoptado el discurso y el método de las grandes agencias y productoras coreanas –que son iconos mundiales–; pero solo en la forma y la puesta en escena. Con esa “fachada”, inciden ambos expertos, han conseguido que muchas jóvenes “vean en redes un porvenir glamouroso y bien remunerado”, lo que hace que “bajen” sus defensas y confíen en este tipo de propuestas.

* El 30 de enero de 2024 se ha suprimido el nombre de una empresa citada para dar contexto del funcionamiento de este tipo de contrato para no dar lugar a ninguna posible confusión

 

Metodología

Las ‘otras’ streamers: una promesa de trabajo, dinero e independencia que termina en videollamadas sexuales es una investigación de Maldita.es sobre la promoción en redes de las aplicaciones de videollamadas: plataformas de mensajería en las que las llamadas ‘modelos streamers’ tienen la misión de mantener conectados durante horas a usuarios que pagan por un contenido, en ocasiones, sexualmente explícito. 

Explicamos cómo funciona el proceso de captación desde cientos de perfiles de “agencias de streamers” en redes sociales, perfiles que gestionan los pagos en criptomonedas que reciben chicas de todo el mundo bajo la esperanza de un “cambio de vida”. Además, analizamos con ayuda de expertos los riesgos que plantea esta actividad desde el punto de vista de la ciberseguridad, los controles de edad y contenidos, así como el impacto del uso de estas apps para los usuarios y las propias streamers.

Maldita.es ha abordado en esta investigación el fenómeno de las aplicaciones de videollamadas desde diferentes ángulos: 

  • En un primer momento, hemos contactado a tres agencias de streamers diferentes para solicitar información como posibles chicas interesadas en primera persona. A través de los canales de Telegram fijados en sus cuentas de Instagram, hemos contactado con tres administradoras, las mujeres encargadas de gestionar el contacto entre la streamer, la agencia y la aplicación de videollamadas. Estas mujeres nos han ofrecido información sobre el trabajo de modelo streamer. No nos han solicitado información personal, más allá del nombre y de que superáramos la mayoría de edad, aunque no se ha comprobado que ninguno de estos datos fuera real a través de nuestro documento de identidad. En los tres casos, se han pasado todos los filtros y las administradoras estaban dispuestas a darnos de alta como modelos streamer. Un punto al que no hemos llegado. 
  • Maldita.es ha contactado con las responsables de dos agencias de streamers: Lollypop’s Agency y Candy Agency. Se les ha solicitado información para un reportaje y ambas han accedido explicando cuál es el funcionamiento de sus respectivas agencias, cuántas trabajadoras tienen o cómo se constituyeron.
  • Maldita.es también ha contactado, además, con dos mujeres que trabajaron como modelos streamer para saber en qué consistía su rol, qué información tenían antes de empezar, cuánto ganaban o cómo llegaron a ser streamers
  • Para tratar de recabar la máxima información sobre esta tendencia, Maldita.es ha accedido como usuario a una de las apps de videollamadas, concretamente a Candy Chat.
  • Con ayuda de un experto en ciberseguridad, hemos analizado el funcionamiento de esta aplicación. El objetivo ha sido conocer cómo funciona esta app desde dentro. Hemos creado un perfil y hemos tratado de contactar con las streamers, pero no hemos podido completar la experiencia. Hemos recibido llamadas y mensajes de streamers, pero no hemos podido contestar ni realizar videollamadas ya que se requería incluir fondos en la aplicación.

Esta investigación ha contado con la ayuda de diferentes personas expertas y malditos que nos han prestado sus superpoderes, gracias a quienes hemos podido abordar diferentes perspectivas y materias. Entre los malditos y malditas, han colaborado José Antonio Rodríguez, periodista y analista; José Luis Albi, especialista en marketing digital y social media; Silvia Catalán, psicóloga y sexóloga; Jorge Louzao, experto en ciberseguridad; y Miguel Vieito, jurista e investigador en Derecho. También hemos contado con la ayuda de expertos y expertas como Juanan Salmerón, abogado laboralista; Adrián Todoli, doctor en Derecho; Liberto Carratalá, doctor en Sociología; Laura Dávara, experta en Derecho Digital; y Borja Adsuara, experto en Derecho Digital, así como de la Asociación Diaconía España

Si tienes cualquier duda, puedes consultarnos en [email protected]

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.