Ni hay evidencias de que la regla de las mujeres que conviven termine sincronizándose ni el sangrado se corta cuando te duchas. Son algunos de los mitos sobre la menstruación que hemos desmentido desde Maldita.es. Ahora nos habéis preguntado si el hecho de que los fluidos expulsados durante la menstruación incluyan coágulos de sangre puede suponer o no un problema. Pues depende. Aunque, si son pequeños, no hay por qué preocuparse, los grandes pueden producir dolor o actuar como una señal de un problema subyacente.
La regla es un proceso inflamatorio en el que se produce la descamación del endometrio (se desprende la capa interna del útero), que se expulsa mediante contracciones uterinas. El flujo menstrual es el resultado del desprendimiento de la capa endometrial, según afirma a Maldita.es Xusa Sanz, enfermera experta en salud menstrual.
Interpretar la sangre de tu ciclo puede ayudarte a detectar problemas, tal y como cuenta Sanz en su cuenta de Instagram. “La sangre menstrual sale por el cérvix, un orificio bastante pequeño. Para que fluya sin obstruir la salida, tu cuerpo fabrica plasmina (una enzima que evita la coagulación)”, explica.
Lo que sí sería normal, según Sanz, son los “pequeños coágulos similares a bolitas algodonosas”. Sobre todo tras la noche, ya que “la sangre ha podido quedar estancada por la posición horizontal de nuestros cuerpos”.
Pablo Tobías, especialista en Ginecología y Obstetricia en el Hospital Universitario Infanta Cristina y maldito que nos ha prestado sus superpoderes, coincide en Maldita.es en que, en general, es normal que la sangre se coagule pasado un tiempo y no tiene por qué indicar que exista una patología.
Sin embargo, hay ocasiones en la que la presencia de estos coágulos puede suponer una señal para detectar que “algo no anda bien”, según Sanz: “Si la sangre proviene del miometrio (la capa intermedia del útero), entonces sí coagula, ya que es una capa irrigada por abundantes arteriolas (ramas pequeñas del sistema arterial cuya función es regular el flujo a los capilares)”. La experta insiste en que la sangre no debería proceder del miometrio.
Los grandes coágulos de sangre deben hacer sospechar de posible trastorno hemorrágico subyacente, según una revisión publicada en la revista médica Blood. Sanz explica que los coágulos son frecuentes en mujeres con hiperestrogenismo (un desequilibrio hormonal caracterizado por niveles de estrógeno elevados), con miomas o pólipos o cuando existe un problema de coagulación como sucede con la enfermedad de Von Willebrand (un trastorno sanguíneo en el que la sangre no coagula adecuadamente).
Sanz sostiene que habría que prestar atención a coágulos “de un tamaño considerable, unos 2,5 centímetros de diámetro, que además suelen venir acompañados de otros indicadores como sangrado abundante (más de 80 mililitros por ciclo o algo más de la cantidad que cabe en cinco cucharadas soperas)* y dolor menstrual". En ese caso, lo más aconsejable sería acudir a un especialista.
Este tipo de coágulos pueden producir dolor, “ya que obstruyen el orificio de salida y el útero sufre para expulsarlos”. En Maldita.es os hemos contado por qué a unas mujeres la regla les causa más dolor que otras y qué remedios existen para aliviarlo.
* Actualizado el 27 de abril con la cantidad de mililitros que se considera sangrado abundante durante la menstruación.
En este artículo ha colaborado con sus superpoderes Pablo Tobías.
Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.
“Menos bulos, más rigor científico” es un proyecto de DKV Salud con contenido editorial de Maldita.es.