Nos habéis preguntado si es verdad que los cartones en los que suelen almacenarse los huevos son aislantes de sonido. No hay evidencias de que sea así.
“El aislamiento acústico es la permeabilidad que ofrece un elemento frente a la onda acústica, la cantidad de energía que es capaz de evitar que lo traspase”, explica a Maldita Ciencia Andrés Peña, director técnico del Laboratorio de Acústica en Calpe Institute of Technology (Málaga). Según cuenta, los cartones de los huevos no tienen un buen aislamiento acústico y, por lo tanto, no evitan la transmisión de ruido entre dos recintos.
Antonio Peidro Cuadros, ingeniero industrial de Peritaciones Acústicas, confirma a Maldita Ciencia que la capacidad aislante de los cartones de huevo es insignificante. Considera que pueden ser útiles, si acaso, para acondicionar una sala (y que los sonidos se escuchen mejor en su interior). Normalmente al hacerlo, la sala pasa “de sonar a hueco, como un piso vacío, a sonar cálidamente”.
“Pero nunca para aumentar el aislamiento acústico de la sala respecto a los colindantes, a los vecinos. Es decir, su guitarra, su piano o su equipo de música ‘suenan mejor’ en su sala huevera pero sus vecinos seguirán escuchado su ruido por muchos huevos que le eche al asunto”, aclara.
Peidro desaconseja el uso de estos cartones por “su combustibilidad y su total falta de capacidad ignífuga”. “Arden con mucha facilidad”, advierte. El experto considera que utilizarlos es “poco útil, cutre y peligroso”. “Si los encuentra en un local, vigile dónde están los extintores y las puertas de emergencia o, mejor, cambie de local”, avisa.
Si se quiere acondicionar una sala, considera preferible recurrir a los materiales ignífugos que ofrecen las empresas especializadas. Peña cuenta que lo que mejor funciona son los materiales porosos y las fibras de roca o vidrio conocidas como "lanas minerales". Existen, según cuenta, diferentes grosores y densidades de lanas minerales diseñadas para trabajar mejor a diferentes frecuencias.
“Es mucho más difícil atenuar sonidos graves que agudos, por lo que el aislamiento se ha de diseñar en función de las necesidades concretas de cada caso”, destaca. Elena Díaz, responsable de la Comisión Acústica del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Telecomunicación de Andalucía (COITTA), considera que lo mejor sería optar por el asesoramiento de un profesional. Pero si se quiere recurrir a remedios caseros, sugiere a Maldita Ciencia “instalar elementos que estén estancos y no dejen aperturas, como puertas y ventanas, que es donde habitualmente existe la mayor pérdida de aislamientos acústicos”.
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