Únicamente dos de los veintisiete Estados miembros de la Unión Europea (UE) contaban con más eurodiputadas que eurodiputados en el Parlamento Europeo (PE) después de las elecciones de 2019. El primero, Suecia, es el país con más representantes de sexo femenino en la Eurocámara en ese momento, con el 55%. Le sigue Finlandia con el 54%. Estos, como el resto de países, han ido incrementando progresivamente el número de mujeres en la Eurocámara. En esta última legislatura que termina se constituyó el Parlamento Europeo con más representación de mujeres de la historia.
Hay alguna excepción, como Chipre, que en la sesión constitutiva de 2019 no tenía ninguna mujer entre sus 6 representantes en la Eurocámara. En la UE no existe una norma que obligue a los Estados miembros a tener un mínimo de mujeres eurodiputadas en el PE, aunque según los datos de Eurostat, a 1 de enero de 2023 representaban más del 51% de la población europea. La composición de la Eurocámara se basa en elecciones directas celebradas en cada uno de los Estados miembros, en función de sus propias leyes y sistemas electorales. Algunos países como España, Francia y Bélgica tienen políticas nacionales que imponen cuotas de género.
De menos del 20% en 1979 a casi el 40% en la última legislatura: así ha evolucionado el número de europarlamentarias en el conjunto de la Unión Europea
En junio de 1979, los ciudadanos de los entonces diez países miembros de la Unión Europea pudieron votar a sus representantes en las primeras elecciones directas al Parlamento Europeo. mayoritariamente masculino: aunque en un primer momento hubo un 16,6% de mujeres elegidas pero, debido a la entrada de Grecia en la UE en medio de la legislatura y a la reconfiguración que hizo del PE, representaron de media entre 1979 y 1984 el 15,2% del total. La situación no fue muy diferente tras las siguientes elecciones de 1984, cuando las europarlamentarias formaron el 15,7% del Parlamento en esos otros cinco años.
El mayor aumento se produjo en el periodo de 1994 a 1999, cuando las eurodiputadas pasaron de no llegar a ser el 20% del total a representar un 27,4%. Con cada legislatura han ido entrando más mujeres a la Eurocámara hasta ser el 39,3% en 2022, tras las anteriores elecciones de 2019. La cifra más alta hasta la fecha.
Con cada legislatura el número de mujeres en el Parlamento Europeo ha crecido paulatinamente. No obstante, un estudio del propio PE recoge que las mujeres están infrarrepresentadas en política, también a nivel europeo.
Los países del este de la Unión Europea tienen menos representación femenina en el Parlamento Europeo
Hay 13 de los 27 Estados miembros de la Unión Europea que, tras las elecciones europeas de 2019, tienen una cuota de representación femenina en la Eurocámara por debajo del 40%. Un porcentaje algo inferior a la media europea: las mujeres representan el 41% del conjunto del Parlamento Europeo en ese mismo momento. Los países con menos eurodiputadas se ubican en la zona este de la UE: Chipre, Eslovaquia, Rumanía, Grecia, Lituania, Bulgaria, Chequia, Estonia, Polonia, Alemania, Croacia, Bélgica y Hungría.
Destacan los cuatro primeros Estados mencionados, en los que las mujeres suponen menos del 25% de sus representantes. En el hemiciclo constitutivo de esta última legislatura no había mujeres chipriotas. En el caso de Eslovaquia, representaban menos del 15%; en Rumanía el 22% y en Grecia el 24%.
Es igualitaria la representación de hombres y mujeres (50 - 50) en la Eurocámara por parte de Austria, Eslovenia, Francia, Letonia, Luxemburgo, Malta y Países Bajos. Únicamente entre los eurodiputados finlandeses y suecos hay más mujeres que hombres (54% y 55% respectivamente).
Los Estados miembros han ido incrementando el número de eurodiputadas con el paso de los años
La representación de las mujeres en la Eurocámara es más elevada que hace unos años. Los Estados miembros han ido incrementando el número de representantes del sexo femenino en el Parlamento Europeo con el paso de los años. De hecho, el hemiciclo con más representación de mujeres de la historia se constituyó en 2019: el 41% eran eurodiputadas (frente al 16% de 1979).
Los nueve países que forman parte de la Unión Europea desde las primeras elecciones directas al PE en 1979 (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Países Bajos y Reino Unido), han aumentado más de 15 puntos porcentuales el número de mujeres en la Eurocámara en los últimos 40 años.
También han experimentado un aumento en el número de mujeres dentro del PE otros países como Malta, que ha pasado de no tener eurodiputadas en 2004 (año de su inclusión en la UE), al 50% de sus representantes en la última legislatura (2019). Tras las elecciones de 2014 (las segundas en las que participaban los ciudadanos malteses), fue el país con una cuota de género más elevada: el 67% de los políticos escogidos para ocupar un escaño europeo eran mujeres. España ha pasado de tener el 15% representantes de sexo femenino en 1989 a 47% en 2019.
Hay, en cambio, cinco países (del este de la UE) que han reducido el número de eurodiputadas desde el año en el que se incorporaron a la Unión Europea hasta la última legislatura. Bulgaria, Eslovaquia, Estonia, Lituania y Rumanía tenían menos escaños ocupados por mujeres en el PE constitutivo de 2019 que en 2004. La diferencia más notable la registra Eslovaquia, que ha reducido el número de mujeres a menos de la mitad en las últimas cuatro legislaturas: ha pasado del 36% de eurodiputadas al 15%.
Algunos países tienen cuotas de género para mejorar la representación de las mujeres
Esta notable diferencia en la presencia de mujeres en los escaños de cada país está favorecida, como hemos comentado, por la ausencia en la Unión Europea de una norma que obligue a los Estados miembros a cumplir con una cuota de género. En cambio, sí hay países que tienen legislación nacional que busca mejorar la representación de las mujeres en sus Parlamentos. Estos son algunos de ellos:
Francia. El Código Electoral francés establece que las listas de candidatos para las elecciones sean equilibradas en términos de género. Este requisito fue introducido en el año 2000, con la aprobación de la ley de paridad.
España. Según la ley orgánica de régimen electoral general (LOREG), las listas electorales deben tener una composición equilibrada, entendida esta como la presencia de al menos el 40% de mujeres y hombres. Esta medida aclara que se aplica también en las listas al Parlamento Europeo y se introdujo en 2007, con la aprobación de la ley orgánica para la igualdad efectiva de mujeres y hombres.
Bélgica. El Código Electoral Belga especifica que las listas de candidatos deben ser estructuradas de tal manera que exista una paridad estricta en la representación de género, tanto en los candidatos titulares como en los suplentes.
Portugal. La ley de paridad portuguesa establece que al menos el 40% de los candidatos en las listas electorales deben ser de cada género. En este caso, también se especifica que esta norma se aplica para las listas para “la Asamblea de la República, para los órganos de las autarquías locales y para el Parlamento Europeo”.
Grecia. La ley sobre la igualdad de género sustantiva y la prevención y combate de la violencia de género exige que cada lista de candidatos debe incluir al menos un 40% de personas de cada género.
Estas normas se extrapolan al Parlamento Europeo, ya que las elecciones europeas se rigen por las leyes y sistemas electorales de cada uno de los países. En algunos casos incluso se aclara en la propia norma, como es el caso de España o Portugal que hemos comentado anteriormente.
Tres presidentas del Parlamento Europeo frente a 14 presidentes desde 1979
En 1979, a pesar de que las mujeres representaban menos del 20% del total de eurodiputados, la presidencia del Parlamento Europeo la ostentó una mujer: la francesa Simone Veil, que estuvo en el cargo hasta 1982. Fue la primera presidenta electa.
Hubo que esperar a 1999 para que una mujer volviera al cargo, 20 años después. Fue otra francesa, Nicole Fontaine, quien estuvo al frente de la presidencia del Parlamento Europeo hasta 2002. Desde su llegada han vuelto a pasar otros 23 años hasta que en 2022 Roberta Metsola, de Malta, ocupase el mismo puesto, que mantiene en 2024.
De los 45 años que han pasado desde que se celebrasen las primeras elecciones directas, sólo han presidido el PE tres mujeres durante menos de diez años.