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Las mujeres cobran un 21% menos en Estonia y, en Luxemburgo, un 0,7% más: cómo es la brecha salarial en la UE

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Claves
➝ El principio de igualdad de retribución se introdujo en 1957, pero hoy en día todavía persiste la llamada brecha salarial de género en la Unión Europea: las mujeres cobran un 12,7% menos por hora que los hombres
➝ Los Estados miembros del centro de la UE son los que más desigualdad registraron en 2022 (que son los últimos datos disponibles) entre el salario de ambos sexos, siendo la más alta la de Estonia con un 21,3%
➝ Además, en la UE, hay más mujeres en paro que hombres: la tasa de desempleo femenino en abril de 2024 alcanzaba el 6,3%, frente al 5,7% de los hombres
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Con el paso de los años, la Unión Europea (UE) ha implementado una serie de políticas y medidas para promover la igualdad de género. Estas políticas se centran en varios aspectos clave, como la igualdad salarial entre hombres y mujeres. Sin embargo, aunque el principio de igualdad de retribución se introdujo en el Tratado de Roma de 1957, esta desigualdad todavía persiste. Según los últimos datos disponibles, las mujeres de la UE ganan de media un 12,7% menos por hora que los hombres, aunque se ha reducido con el paso del tiempo. 

Esta, y otras circunstancias nacionales, conforman un mapa comunitario con grandes diferencias en cuanto a igualdad de género en el trabajo. Maldita.es ha analizado los últimos datos disponibles en el portal estadístico Eurostat (Oficina de Estadística de la UE) para mostrar las condiciones laborales de las mujeres en cada uno de los países que forman la Unión Europea.

Los hombres cobran un 12,7% más que las mujeres en la Unión Europea

Se conoce como brecha salarial entre hombres y mujeres a la diferencia entre los salarios percibidos por los trabajadores según su sexo. En las estadísticas de Eurostat se calcula sobre la base de la diferencia media entre los ingresos brutos (antes de deducir el IRPF y las cotizaciones a la seguridad social) por hora de todos los trabajadores (de empresas con más de 10 empleados, en la mayoría de los casos, sin restricciones de edad ni horas trabajadas). Esto se consigue restando el salario medio por hora de las mujeres al de los hombres y dividiendo el resultado entre este último.

Con este cálculo, obtenemos que, en los países de la Unión Europea, los hombres cobran un 12,7% más que las mujeres de la misma zona. Esta cifra (de 2022, la última disponible en Eurostat) se ha extraído de los datos de 26 de los 27 Estados miembros: no hay información disponible para Grecia para ese año. La brecha salarial a nivel mundial oscila el 20%, según los datos publicados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 2023.

Los sueldos de las mujeres se han ido equiparando al de los hombres en la UE con el paso del tiempo. La serie histórica disponible en Eurostat refleja que de 2010 a 2022, la brecha salarial de género se ha reducido 3,1 puntos porcentuales. En estos doce años ha pasado de 15,8% a 12,7%. El año con la diferencia más notable entre los salarios de ambos sexos fue 2012, cuando los hombres cobraban un 16,4% más que las mujeres.

Hay varios factores que explican la diferencia de salario entre hombres y mujeres. Según explican la entidad de la ONU para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer en su página web (ONU Mujer) y el Parlamento Europeo, las causas de la brecha salarial son, principalmente:

  • El empleo a tiempo parcial. Hay más mujeres que hombres con este tipo de jornada laboral, que está peor remunerada que un trabajo a jornada completa. Según los datos de Eurostat, de 2022, casi un tercio de las mujeres en la Unión Europea (28 %) trabajan a tiempo parcial; frente al 8% de los hombres.

  • Peores empleos. Las mujeres tienen menos posibilidades de obtener empleos de mayor nivel. El 24% de la brecha salarial de género puede explicarse por una sobrerrepresentación femenina en sectores con salarios relativamente bajos como cuidados, sanidad o educación, según explica el Parlamento Europeo. También presentan dificultades para progresar en su carrera profesional. Generalmente, acceden a menos puestos ejecutivos que los hombres

Según explican ambas instituciones, estos factores están motivados por un reparto desigual de los trabajos no remunerados de cuidados (de menores y mayores), que los asumen mayoritariamente las mujeres. Esta realidad se ve reflejada en la brecha salarial de género por edades: tiende a ser menor en los grupos de edad más jóvenes y se amplía más tarde, según el Parlamento Europeo, “como resultado de las interrupciones laborales de las mujeres”.

La brecha salarial de género es mayor en los países del centro de la Unión Europea

La brecha salarial difiere en la UE de unos países a otros. En el periodo analizado, 12 de los 26 países registran una diferencia en el sueldo de hombres y mujeres por encima del umbral europeo. En 2022, la mayor brecha salarial de género fue la de Estonia (21,3%). Luxemburgo es el único Estado miembro en el que las mujeres cobran más que los hombres (0,7%), y la siguiente más baja fue la de Italia (4,3 %).

España se sitúa entre los diez países con una brecha salarial de género más reducida en 2022, con un 8,7%. Una diferencia dos veces más pequeña que hace 20 años: en 2002, los hombres cobraban un 20,2% más que las mujeres empleadas en nuestro país. Esta cifra (la más elevada de la serie histórica) ha ido disminuyendo con el paso de los años, llegando al mínimo en 2021 y manteniéndose en 2022. Pero la mayor diferencia interanual se registró de 2018 a 2019, cuando la brecha salarial entre hombres y mujeres pasó de 11,9% a 9,4% por la aprobación de normativa estatal y europea que buscaba la igualdad efectiva entre sexos en el ámbito laboral.

Una brecha salarial de género más pequeña en un país específico no significa necesariamente más igualdad de género, según las conclusiones publicadas por el Parlamento Europeo junto a los datos de brecha salarial en 2021. Este texto explica que,  en algunos Estados miembros, las brechas salariales más bajas suelen estar vinculadas a una menor participación de las mujeres en el mercado laboral. Mientras que una amplia diferencia de sueldo entre sexos tiende a estar relacionada con altas proporciones de mujeres en el trabajo a tiempo parcial o su concentración en un número restringido de profesiones.

Más mujeres desempleadas que hombres en la Unión Europea

En abril de 2024, la tasa de desempleo de las mujeres en la Unión Europea era del 6,3%, mientras que la tasa de los hombres se situaba en el 5,7%, según los últimos datos disponibles en Eurostat. Estas cifras representan el porcentaje de desempleados (personas de 15 a 74 años sin trabajo en la semana de consulta y que han buscado empleo activamente) sobre la población activa (número total de personas empleadas y desempleadas). 

Por otro lado,10 de los 27 países de la UE superaron el 6,3% de paro femenino en el mes de abril. España es el segundo con una tasa de desempleo femenino más elevada en este periodo con el 13% (y el primero con más paro general con el 11,7%). Esto supone 10,4 puntos más que Malta, el país con menos mujeres desempleadas (2,6%).

Las cifras de desempleo femenino se incrementan todavía más entre las más jóvenes. El 13,7% de las mujeres de 15 a 24 años de los Estados miembros no tenían trabajo en abril de 2024. España lidera este ránking con una tasa de desempleo femenino en este grupo de edad del 25,3%; frente a menos del 5% de Malta o Alemania. 

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