“Personas que declaran que, sin ejercer alguna actividad económica, se dedican a cuidar su propio hogar sin contraprestación económica alguna”. Esta es la definición que hace el Instituto Nacional de Estadística (INE) de las personas dedicadas a labores del hogar y que registra como población inactiva a efectos laborales, las tradicionalmente llamadas ‘amas de casa’.
Según estos datos, que la Encuesta de Población Activa (EPA) recoge desde hace varias décadas, la mayoría de personas en esta situación son mujeres, aunque la cifra ha bajado a lo largo de los años. Desde 2002, cuando había 5 millones, se ha pasado a las 2,8 millones en el cuarto trimestre de 2023. En la actualidad la mayoría tiene más de 70 años, mientras que dos décadas atrás, sus edades oscilaban mayoritariamente entre los 50 y los 60 años.
El número de mujeres dedicadas a labores domésticas sin remuneración se ha reducido un 43% desde 2002
A cierre del cuarto trimestre de 2023, el INE cuantificaba en 2,8 millones las mujeres dedicadas a labores del hogar. Es una cifra un 43,3% menor de la que había en 2002, cuando había unos 5 millones.
La tendencia durante todos estos años ha sido a la baja, excepto por el repunte de 2020, concretamente durante el trimestre en que se declaró la pandemia mundial de COVID-19, que implicó un aumento general de las personas en situación de inactividad.
Otro aspecto que destaca es el aumento de hombres en inactividad dedicados a labores del hogar. Aunque la cifra a día de hoy es mucho más baja que la de las mujeres (446.000 frente a 2,8 millones), se ha multiplicado por cinco con respecto a 2002.
El INE registra la situación de las personas dedicadas a estas labores desde 1976, cuando la cifra de mujeres llegaba a los 8 millones. Sin embargo, la metodología de la encuesta ha cambiado varias veces desde entonces. La última serie de datos que permite comparar los datos actuales comienza en 2002.
El perfil de las personas dedicadas al hogar ha cambiado en los últimos 22 años: ahora se concentra más en las mujeres mayores de 70 años
Mientras que hace unos 20 años, el perfil por edades de las mujeres que trabajaban en el hogar era más homogéneo, los datos actuales muestran que ahora se concentra sobre todo en las mayores de 70 años. La mayoría de hombres en esta situación, sin embargo, tienen de 60 a 64 años.
Por otro lado, según esta misma encuesta, el número de mujeres con empleo se ha triplicado en los últimos 50 años y el último trimestre de 2023 ha cerrado con el máximo histórico: casi 10 millones de mujeres ocupadas.
La Diputación Foral de Bizkaia publicó en 2003 un estudio sobre el trabajo doméstico desde una perspectiva jurídica, laboral y fiscal. Entre otras cosas, el estudio destaca los pasos que han dado administraciones públicas en el reconocimiento institucional del trabajo en el hogar, como las diversas resoluciones de la ONU al respecto de su medición.
