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Consecuencias de la desinformación: insultos, amenazas y campañas de odio contra los servicios de meteorología

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  • En varios países, los trabajadores de meteorología y de las ciencias del clima se exponen a insultos, amenazas y comentarios abusivos en redes por hacer su trabajo
  • Estos comportamientos se comparten, en paralelo, junto a teorías de la conspiración y desinformación que niega el cambio climático
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“Asesinos”, “os estamos vigilando”, “criminales”, “lo pagaréis”. Estos son algunos de los mensajes que la Agencia Estatal de Meteorología española (AEMET) denuncia haber recibido en sus redes sociales. Aunque el vídeo que recopila esta retahíla de odio es de abril de 2023, no hace falta rebuscar en los contenidos más antiguos para encontrar más insultos y amenazas dirigidas contra el trabajo de los profesionales de la meteorología.

Sin embargo, esta situación no sólo ocurre en España. Otros profesionales y servicios relacionados con la previsión del tiempo también están recibiendo improperios y mensajes con propósito intimidatorio, como cuentan los propios profesionales y comparten los periodistas de verificación. Este vínculo entre desinformación y ataques a profesionales que comparten información veraz y contrastada también se ha dado y ha sido objeto de investigación científica en el caso de científicos durante la pandemia de COVID-19.

Estados Unidos: insultos y amenazas por los huracanes Helene y Milton

La situación más reciente de estos improperios se está dando en Estados Unidos, donde se han dado dos eventos meteorológicos extremos, los huracanes Helene y Milton, con pocas semanas de diferencia. 

El magazine Rolling Stone recopila declaraciones de diferentes profesionales de la meteorología, como Matthew Cappuci, quien dice estar “perdiendo la fe en la humanidad” después de ser testigo de múltiples teorías de la conspiración que complican su trabajo. James Spann, meteorólogo basado en Alabama, indica que su buzón de mensajes se ha “inundado” de desinformación y de mensajes que le exigen que “deje de mentir sobre el control del Gobierno sobre el tiempo”.

“Publicar una previsión de huracanes y empezar a recibir acusaciones de que he creado el huracán por trabajar en alguna especie de entidad secreta illuminati es decepcionante y angustiante, y es el resultado de un descenso en la confianza pública”, comparte Capucci.

Katie Nickolau, meteoróloga, suele atender a comentarios sobre dudas del tiempo atmosférico en sus redes sociales. Sin embargo, estas redes también están acogiendo comentarios relacionados con teorías de la conspiración sin pruebas y amenazas a profesionales del clima, al tiempo que circulan diferentes conspiraciones y desinformaciones durante estos dos huracanes. Luke Sampe, meteorólogo, compartió en su cuenta un mensaje que le enviaban por contestador telefónico donde le decían que “iban a colgarlo de una soga” porque “estaban haciendo cosas con los aviones”, en referencia a la conspiración de los chemtrails.

Tuit de Katie Nickolau donde comparte una interacción en Facebook. En la imagen, un usuario pide “detener la respiración” de quienes han fabricado los huracanes y sus afiliados.

“Parar la desinformación se está convirtiendo en una parte agotadora de nuestro trabajo, restando tiempo a las previsiones meteorológicas o a enviar otra información que puede ser útil”, indica Nicolau.

Francia: insultos a presentadores del tiempo y climatólogos

En Francia se han dedicado insultos tanto al servicio meteorológico nacional, a las personas que trabajan presentando la información meteorológica en televisión y a científicos del clima concretos que suelen difundir información sobre el calentamiento global en sus redes sociales.

En abril de 2023, el servicio meteorológico nacional Météo-France fue objeto de descalificaciones en redes sociales después de que una serie de publicaciones en Twitter (ahora X) acusara al servicio de “sobreestimar el calentamiento global”. Basaba esta acusación en que el indicador térmico nacional —una especie de promedio de temperaturas basándose en 30 estaciones de la Francia metropolitana— estaría arrojando unas temperaturas superiores a las reales como consecuencia del efecto isla de calor

Tanto en el hilo donde comparten un desmentido como en comentarios adyacentes, las interacciones de Twitter de Météo-France reflejan los descalificativos que les acusan de “manipuladores del calentamiento global” o “propagandistas”.

Antes de esto, en enero de 2020, la periodista climática Chloè Nabèdian, que por entonces era la responsable de presentar el parte meteorológico en el canal de televisión France 2, compartió en una entrevista que solía recibir cartas “lascivas” y comentarios “poco saludables”, incluyendo “insultos un poco violentos” que también se extendían a otras compañeras que daban el parte.

Otros habituales de las campañas de odio son los investigadores del clima. En este artículo de Novethic de agosto de 2023 se recopilan algunos de los insultos que reciben en redes, muchos de ellos amenazas serias o descalificaciones racistas, sobre el físico o menospreciando sus conocimientos y trabajos en este asunto. 

Ejemplo de contenidos recibidos por el doctor en agroclimatología Serge Zaka. Traducción resumida: “Muy amable por parte de este inmigrante que venga a decirnos a los franceses cómo debemos vivir. Pero no le interesa su propio país, ¡o ya ha solucionado el problema de la agricultura donde viven sus padres!”.

El doctor en agroclimatología Serge Zaka, el meteorólogo Romain Weber, el director de investigación del Centro Nacional de Investigación Científica y autor del IPCC Christophe Cassou, y la geógrafa y miembro del Alto Consejo Sobre el Clima Magali Reghezza-Zitt coincidían en que estos ataques por parte de desinformadores han aumentado desde que Elon Musk adquirió Twitter.

Alemania: odio hacia los presentadores del tiempo

De manera similar a lo que pasa en España, Estados Unidos y Francia, los profesionales de la meteorología en Alemania también se exponen a insultos y mensajes de odio en redes sociales por hacer su trabajo. 

Paulina Thom, verificadora de Correctiv, miembro al igual que Maldita.es de la IFCN, explica a Maldita.es que este problema “definitivamente existe” en el país, recalcando que por lo general, las noticias sobre cambio climático “suelen recibir muchos comentarios negativos y de escépticos en redes sociales, además de acusaciones de que están sembrando el pánico”.

Los trabajadores de la empresa pública de radiodifusión ARD Karsten Schwake, presentador del tiempo, y Özden Terli, meteorólogo, cuentan en un reportaje de NDR a qué comentarios se exponen: “Eres una marioneta de los histéricos del clima”, “otra voz comprada que nadie necesita escuchar más”, “un charlatán del sistema, nada más”.

Terli afirma que se está haciendo un esfuerzo en explicar la conexión entre tiempo y clima, dos elementos diferentes pero con muchísima relación entre sí, y cómo la crisis climática está cambiando las previsiones del tiempo. Así, él cree que estos ataques son un intento de evitar que se informe sobre asuntos climáticos “desacreditando a la persona que presenta estos temas”.

Torald Staud, periodista del medio especializado en clima Klimafacten.de, señala en un artículo de Taz que parte de las narrativas negacionistas del clima nacen de un contexto de “ruido de fondo hostil generado durante la pandemia”. “Al igual que los insultos fueron surgiendo lentamente a medida que la pandemia iba remitiendo, el tiempo y el odio de estas personas se dedican a otros temas” interpreta. 

Así, dice no estar sorprendido por que los presentadores del tiempo reciban cada vez más ataques: “Vemos cada vez imágenes más espectaculares sobre eventos meteorológicos extremos intensificados y los meteorólogos tienen que abordarlo, entonces son atacados por personas que no quieren enfrentarse a la realidad”.

Portugal: ‘chemtrails’ en grupos de Facebook y en la Assembleia

Según explica a Maldita.es Filipe Pardal, director de operaciones de Polígrafo, miembro al igual que Maldita.es de la International Fact-Checking Network (IFCN), no han observado —de momento— un recrudecimiento de insultos y amenazas a meteorólogos y otros expertos del clima en Portugal más allá de “los troles en redes sociales”. Sin embargo, uno de los temas que más atrae la atención de los desinformadores es la conspiración de los chemtrails. Tal es el caso que en 2017 una petición online consiguió las suficientes firmas para que se discutiese este asunto en la Assembleia da República. La discusión parlamentaria, eso sí, no llegó a los siete minutos.

Esta petición, así como otras desinformaciones meteorológicas, se han compartido ampliamente por el grupo de Facebook “Rastos Químicos Portugal / Chemtrail Activism”, creado en marzo de 2011 y con más de 16.000 miembros suscritos. 

Es en este grupo donde se comparten mensajes y narrativas que sitúan a controladores aéreos como “cómplices de crímenes contra la humanidad y genocidio” o al secretario general de la ONU António Guterres “buscado por crímenes contra la humanidad” como supuestos cómplices del vertido de chemtrails, o se defiende a un supuesto piloto que dice haber sido despedido por negarse a esparcir estas estelas químicas.

Ejemplo de contenido compartido por el grupo “Rastos Quimicos Portugal / Chemtrail activism”.

Haciendo una búsqueda para ver qué dicen las publicaciones del grupo sobre los meteorólogos en Maldita.es no encontramos —al menos aún, ni de manera sistemática— insultos o amenazas a estos trabajadores, sino más bien se les muestra como “colaboradores” de “programas militares” de chemtrails. También hay espacio para compartir otras conspiraciones como HAARP.

Italia: odio hacia los divulgadores climáticos

Según explica Simone Fontana a Maldita.es, periodista de Facta —miembro al igual que Maldita.es de la IFCN— la dinámica que ocurre en Francia y España “no se ve particularmente en el debate público italiano, o al menos no de forma sistemática”. Sí que son habituales los casos de desinformación meteorológica pero suelen ser contenidos importados de Reino Unido, Francia o Alemania. “Los meteorólogos no se consideran, de forma general, una categoría divisiva”, recalca.

Quienes sí suelen atraer los insultos son los divulgadores climáticos. Por ejemplo, Mario Tozzi, geólogo y divulgador científico que participa en el canal de televisión Rai 3, es un habitual receptor de insultos variados en cuanto publica contenidos sobre el cambio climático. Luca Lombroso, meteorólogo y divulgador ambiental, también llamó la atención después de recibir diferentes mensajes de “odiadores y negacionistas” que afirmaban que era un “meteoterrorista”, además de habituales comentarios sobre su pronóstico del tiempo afirmando que en verano “siempre ha hecho calor”.

Ejemplos de contenidos dirigidos al meteorólogo Luca Lombroso. El mensaje de Lombroso habla de la llegada de un anticiclón africano que aumentará las temperaturas, a lo que añade: “Es hora de que los negacionistas del clima se den cuenta de que el cambio climático está aquí y debemos actuar juntos, afrontar el desafío colectivamente”.

Otro ejemplo que comparte Fontana es el de Giovanni Storti, un actor de comedia que, por su posición como defensor de causas medioambientales, también es objeto de insultos.

Reino Unido: insultos y descalificaciones en cuanto los termómetros tocaron los 40 ºC

En el verano de 2022, Reino Unido sufrió una ola de calor que rompió por primera vez la barrera de los 40 ºC desde que existen registros estandarizados. El cambio climático hizo que esta ola de calor fuese hasta 10 veces más probable, según un trabajo del World Weather Attribution. Sin embargo, constatar esto en antena hizo que el equipo de meteorólogos de la cadena de televisión BBC se expusiera a insultos y comentarios abusivos “sin precedentes”.

Ejemplos de comentarios recibidos por el equipo de meteorólogos de la BBC: “Contrólate”, “qué montón de basura para causar una falsa emergencia”, “cuándo os vais a disculpar por tal sinsentido patético, absurdo y alarmista, o quizás deberíais dimitir por vergüenza”.

Matt Taylor, meteorólogo de la televisión británica, afirmó que no había experimentado nada igual en 25 años de carrera. “Es el tono más abusivo que he recibido. He desconectado un poco de ello porque era demasiado deprimente leer algunas de las respuestas”, compartía.

Otros mensajes también apuntaban a los trabajadores del Met Office y de la Real Sociedad Meteorológica, el servicio meteorológico nacional, acusándolos de “alarmismo” e “histeria”. Liz Bentley, directora ejecutiva de la Real Sociedad Meteorológica, afirma que muchos de estos comentarios insultantes “aumentan cuando el mensaje del cambio climático es intrínseco a la noticia”.

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