La mayoría de las estrategias climáticas de 24 de las principales empresas mundiales están “sumidas en compromisos ambiguos” y “planes de compensación que carecen de credibilidad”, aunque hay buenas prácticas reproducibles en “una minoría”, de acuerdo con un análisis realizado por la organizaciones Carbon Market Watch y NewClimate Institute. Estas compañías fueron responsables en 2019 del 4% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero, que causan el calentamiento global, según sus cifras oficiales. Esta es la principal conclusión del Monitor de Responsabilidad Climática Corporativa 2023, elaborado por segunda vez por estas organizaciones. Os explicamos sus conclusiones con más detalle.
Las multinacionales se han comprometido a descarbonizar su actividad economía para limitar la subida de temperaturas
Las 24 compañías escogidas son una muestra de las 8.307 empresas adheridas a la campaña Carrera Hacia el Cero, promovida por la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático para “aunar el liderazgo y el apoyo de empresas, ciudades, regiones e inversores en pro de una recuperación sana, resistente y sin emisiones de carbono”. Al unirse a la campaña, las empresas se comprometieron a lanzar un plan de descarbonización para lograr cero emisiones netas (fijar tantas como las que liberen) en 2050 a más tardar, en consonancia con el objetivo del Acuerdo de París de limitar la subida de temperaturas a 1,5 ºC frente a la época preindustrial.
Para seleccionar la muestra, han escogido de todas las firmantes de la iniciativa a las tres compañías con más ingresos anuales de ocho sectores: fabricantes de automóviles, electrónica; moda al por menor; alimentación y agricultura; tecnología de la información y la comunicación; transporte marítimo y aviación; siderurgia y cemento; y venta al por menor en supermercados.
El análisis de estas estrategias climáticas por parte de Carbon Market Watch y NewClimate Institute concluye que 15 de los 24 planes tienen “baja o muy baja integridad” porque sus compromisos de reducción de emisiones son “totalmente insuficientes” para la trayectoria de descarbonización que logre el objetivo de no superar los 1,5 ºC de calentamiento. Además, los objetivos y los posibles planes de compensación siguen siendo ambiguos.
De cumplirse, los planes climáticos de estas empresas sólo reducirían el 36% de sus emisiones para 2050, en lugar del 90-95% necesario. Para 2030, cuando la humanidad debería reducir a la mitad su huella de carbono para no superar los 1,5 °C, las 22 empresas con objetivos para ese año sólo se han comprometido a reducir un 15% de sus emisiones reales, “o hasta el 21% en la interpretación más optimista de sus compromisos”.
La reducción de emisiones se basa sobre todo en proyectos de reforestación que el estudio considera inadecuados
Además, casi todos los planes climáticos se basan en la compensación para reducir la huella de carbono de sus empresas entre un 23% y un 45%, es decir, retirar una parte del CO2 de la atmósfera que emiten con su actividad económica. De forma natural los árboles y el resto de vegetación captan CO2 de la atmósfera o disuelto en agua y, gracias a la fotosíntesis, con la ayuda de la luz solar, lo utilizan en la elaboración de compuestos orgánicos, necesarios para su desarrollo. Basándose en esta lógica, tres cuartos de las compañías confían en proyectos de bosques y relacionados con el uso de la tierra. Pero los autores del informe señalan que el almacenamiento biológico de carbono es “fundamentalmente inadecuado” porque “el carbono secuestrado en suelos y bosques es muy vulnerable a las perturbaciones naturales y antropogénicas, como los incendios forestales o la erosión del suelo”. Por tanto, es probable que ese carbono se libere de nuevo en unos años o unas décadas.
Otras investigaciones han apuntado también en esta dirección. De hecho, el medio británico The Guardian publicó en enero una investigación que concluyó que más del 90% de las compensaciones de carbono en la selva tropical de la mayor certificadora de créditos de carbono carece de valor y no reduce las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera. Además, si esta compensación de las emisiones fuese imitada por el resto de empresas se necesitarían los recursos de entre dos y cuatro planetas para hacerlo, indica el documento.
Buena nota en transparencia y una minoría con compromisos “creíbles”
En cambio, la mayoría de las 24 empresas analizadas muestran al menos “un nivel moderado de transparencia”. También han encontrado ejemplos de empresas con “compromisos creíbles de descarbonización y empresas que adoptan medidas proactivas e innovadoras para reducir las emisiones”, aunque son una “minoría”, según el Monitor de Responsabilidad Climática Corporativa 2023.
Sólo Maersk, la compañía de transporte marítimo de mercancías más grande del mundo, tiene una estrategia climática calificada como “razonable” por estos investigadores. Esta empresa es una de las cinco de la muestra analizada que se ha comprometido a descarbonizar al menos el 90% de sus emisiones para el año que se fijaron llegar a las cero emisiones netas (en el caso de Maersk, 2040). También trabaja en tecnologías que abordan las principales fuentes de emisiones, como invertir en combustibles y buques alternativos.
La lista de las 24 compañías analizadas
La lista completa, por orden alfabético, de las 24 compañías analizadas consiste en: Ahold Delhaize (multinacional dedicada a la distribución con marcas como los supermercados estadounidenses Giant), Amazon, American Airlines, Apple, ArcelorMittal (la mayor siderúrgica en todo el mundo), Carrefour, Deutsche Post DHL, Fast Retailing (minorista con sede en Japón y marcas como Uniqlo), Foxconn (fabricantes de productos electrónicos para otras compañías como Apple, Nintendo, Lenovo y Sony), Google, H&M, Holcim (cementera), Inditex, JBS (empresa brasileña de alimentación, Maersk, Mercedes-Benz, Microsoft, Nestlé, PepsiCo, Samsung, Stellantis (fabricante de vehículos de marcas como Citroën, Fiat, Opel, Peugeot, Chrysler y Alfa Romeo), Thyssenkrupp (fabricante de acero y ascensores), grupo Volkswagen (que incluye a marcas como Audi, Ducati, SEAT y Škoda además de Volkswagen) y Walmart (supermercados).