¡Hola, malditas y malditos! Es el último viernes del mes y ya sabéis que toca el consultorio de Maldito Clima. Esta vez hablaremos de dónde tirar las lentillas desechables, a partir de qué temperatura empieza y acaba el verano y si la tectónica de placas puede influir en el cambio climático actual (spoiler: no). Ah, y de cuáles son los riesgos de que se sulfaten las pilas.
Seguro que tienes un montón de dudas sobre medio ambiente, energía y muchos otros temas. Ya sabes que responderemos a las preguntas que nos hagas a través de nuestra web, nuestra cuenta de Twitter, nuestro correo electrónico ([email protected]) y nuestro chatbot de WhatsApp (+34 644 229 319) ¡Vamos allá!
¿Dónde se tiran las lentillas desechables?
Ahora las ves, ahora no las ves. Las lentillas nos ayudan a mejorar nuestra vista aunque a veces cuesta encontrarlas. Y, si son desechables, también puede ser difícil saber en qué contenedor van. La respuesta es que van al de restos-no orgánico (el de color gris).
Lo primero que debes saber es que no es una opción tirarlas por el desagüe o el inodoro. La Universidad Estatal de Arizona (Estados Unidos) analizó qué pasa con las lentillas cuando se van por las depuradoras de aguas residuales y descubrió que acaban fragmentadas en microplásticos.
Pero, pese a ser de plástico, no se deben tirar al contenedor amarillo. Ese cubo está reservado a los envases, no a los plásticos, pese a que habitualmente podamos llamarlo así. Al no ser biodegradable ni un envase, el contenedor al que deben ir es al de restos, explica en su web la organización especializada en reciclaje Ecoembes.
También te hemos explicado dónde tirar las chapas de las botellas, las mascarillas o un test de embarazo.
¿A partir de qué temperaturas se considera verano en España?
En verano hace calor, en invierno hace frío y el agua moja. Estas podrían considerarse tres verdades universales. Más allá de lo evidente, nos habéis preguntado a partir de qué temperatura se habla de verano como tal. La Agencia Española de Meteorología (AEMET) ha establecido un criterio para determinarlo. También ha analizado las temperaturas en España desde 1971 y ha concluido que el verano cada vez es más largo y cálido.
Desde un punto de vista del calor (y sin tener en cuenta las estaciones meteorológicas ni astronómicas), este periodo estival comienza en un lugar concreto cuando, a partir del 1 de mayo, la temperatura máxima durante 7 días consecutivos iguala o supera la media de las máximas registradas entre el 18 y el 24 de junio del periodo 1981-2010. Por su parte, el final del verano por temperatura llega cuando, durante 7 días consecutivos antes del 31 de octubre, la temperatura máxima es inferior a la media de las máximas registradas entre el 18 y el 24 de septiembre en el mismo periodo 1981-2010. Así lo ha considerado la AEMET.
El meteorólogo de la AEMET César Rodríguez Ballesteros ha explicado en su blog personal cuál es la temperatura umbral en la que empieza el verano en 44 estaciones de España. Por ejemplo, en A Coruña el verano es a partir de los 21,1 ºC mientras que en Córdoba los 32,2 ºC ya son temperaturas máximas veraniegas. Al bajar de los 29,9 ºC de máxima acaba el verano en la ciudad andaluza.
En base a estos valores, los veranos actuales (el último año analizado por la AEMET ha sido 2018) son prácticamente 5 semanas más largos que a comienzos de los años 80.
La AEMET pone como ejemplo la estación meteorológica de la ciudad de Madrid situada en el Parque del Retiro. A comienzos de la década de 1970, el verano en cuanto a temperaturas comenzaba el 15 de julio y acababa el 16 de septiembre. En 2018, las temperaturas veraniegas empiezan de media el 11 de junio y se alargan hasta el 22 de septiembre. De esta forma, el verano madrileño ha pasado de durar 63 a 103 días de media en 47 años. El verano se ha alargado 9,31 días cada 10 años en la capital de España.
¿Y qué pasa con el invierno? Rubén del Campo, portavoz de la AEMET, aclara a Maldita.es que, por el momento, no se han calculado esas temperaturas umbrales para definirlo.
¿La tectónica de placas influye en el cambio climático actual?
A través del formulario de preguntas de nuestra web, nos habéis planteado que “el cambio climático se debe al movimiento de las placas tectónicas” y que “ha existido y existirá siempre”. Esta afirmación es falsa. Según los expertos consultados por Maldita.es, la tectónica de placas puede influir en el clima en períodos de millones de años, no en décadas, como ocurre con la crisis climática actual.
Por ejemplo, el movimiento de las placas ha abierto pasos oceánicos, como el Estrecho de Gibraltar, que han afectado a las corrientes marinas. Estas corrientes “distribuyen el calor a lo largo de todo el planeta” afectando al clima global, explica a Maldita.es Margarita García, investigadora científica en el Centro Oceanográfico de Cádiz (CSIC) y maldita que nos ha prestado sus superpoderes.
Por otra parte, “la tectónica ha ido cambiando el número, tamaño y posición de los continentes en el globo, acercándolos o alejándolos del Ecuador o de los polos” y cambiando así sus condiciones climáticas. Pero, según la experta, los movimientos tectónicos funcionan a una escala temporal de millones de años. “Son tan lentos que se puede considerar que no tienen impacto a la escala del cambio climático actual”, que está ocurriendo en “decenas de años”, concluye.
Por ejemplo, la placa litosférica del continente americano y las unidas a Europa y África se están separando a un ritmo de cuatro centímetros por año, según un estudio publicado en la revista Nature en 2021 y realizado por científicos de la Universidad de Southampton (Reino Unido). A ese ritmo, los continentes se alejarían apenas ocho metros en 200 años, mientras que el calentamiento global se está notando en las últimas décadas.
Antonio Manjón-Cabeza, geólogo investigador en el Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra y también maldito que nos ha prestado sus superpoderes coincide con García. Se trata de una desinformación que parte de elementos verdaderos para construir una conclusión falsa, explica a Maldita.es. Es cierto que el planeta ha estado desde su formación en un cambio climático permanente y también es cierto que el movimiento de las placas modifica varios fenómenos que pueden influir en el clima, pero ambos “son procesos que operan en la escala de millones de años”. “Ninguno de ellos puede explicar un cambio climático a escala humana”, insiste el experto.
Atribuir a la crisis climática una causa geológica es una de las narrativas negacionistas más comunes, según el estudio publicado en 2021 en la revista Nature. Su intención es transmitir la idea general de que el cambio climático actual no está provocado por la acción humana.
¿Por qué se sulfatan las pilas y qué riesgos tiene?
Seguro que te ha pasado. Un mando a distancia que ya no usas y cuando lo abres descubres que a la pila le ha salido cierta sustancia, lo que se conoce como pila sulfatada. “El proceso de sulfatación suele ocurrir más en las baterías de los coches que en las pilas”, explican a Maldita.es desde el portal Recicla tus pilas, impulsado por la Junta de Andalucía y otras instituciones.
“La sulfatación se produce cuando una batería de plomo-ácido se ve privada de una carga completa”, resume la web especializada Battery University. Es muy habitual en las baterías de arranque de los coches que circulan por la ciudad con accesorios que requieren mucha carga, pues un motor en ralentí o a baja velocidad no puede cargar la batería lo suficiente, ejemplifican.
Cuando la batería está en uso (o sea, mientras se descarga), se forman pequeños cristales de sulfato de plomo de apariencia esponjosa, que son normales y no perjudiciales. El problema llega “si se tarda varios días o bastantes horas en poner a cargar la batería”, pues esos cristales de sulfato de plomo van aumentando de tamaño con el tiempo, explican en el portal Comercialcaravaning, centrado en las autocaravanas, que utilizan baterías para proveer de electricidad a los distintos servicios del vehículo.
La sulfatación “es la causa número uno de fallo temprano de las baterías”, dicen en esta otra web especializada, CrownBattery. Para evitarlo hay que cargar completamente la batería antes de guardarla. En Battery University recomiendan usar iones de litio, “una batería que prefiere una carga parcial a una carga completa”. Estas son las diferencias principales entre las baterías de plomo-ácido y las de litio.
En cuanto a las pilas de aparatos domésticos, también pueden sulfatarse si el dispositivo, como un mando a distancia o una radio vieja, lleva sin utilizarse varios años. Aunque esto “es menos usual, es bastante raro que ocurra”, aseguran desde el portal Recicla tus pilas. Cuidado, porque si alguien ingiere una pila sulfatada o la rompe con los dientes, puede sufrir una irritación en la boca que hay que tratar.
"En las pilas alcalinas que usamos para alimentar los equipos domésticos hablaríamos de oxidación. Con el tiempo, las pilas alcalinas son propensas a presentar fugas de hidróxido de potasio, un agente cáustico que puede causar irritación de las vías respiratorias, los ojos y la piel", cuenta a Maldita.es Joan Masip, profesor y maldito que nos ha prestado sus superpoderes.
Recuerda que es importante desechar correctamente las pilas usadas, pues contienen elementos químicos como el cadmio, el níquel o el mercurio que pueden contaminar el suelo y el agua o emitir gases de efecto invernadero si se queman. Guardarlas en el típico “cajón de sastre” de casa puede provocar incendios.
Y por último…
Antes de despedirnos, os recordamos que no somos ambientólogos pero tenemos la ayuda de personas que son expertas en su campo para resolver vuestras dudas. En el caso de preguntas sobre salud y medioambiente, trataremos de responderlas aunque lo mejor es que acudas a un profesional sanitario si tienes alguna dolencia. ¡Gracias por leernos y buen fin de semana!
Para la redacción de este artículo nos han ayudado los malditos Margarita García, Antonio Majón-Cabeza y Joan Masip.
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