Nosotros

Maldita.es lanza un nuevo proyecto para hacer frente a la desinformación sobre agricultura, alimentación y el mundo rural

Publicado el
Tiempo de lectura: 3 minutos

La Fundación Maldita.es pone en marcha el proyecto MALAGRI, Maldita Agricultura: Promoting Reliable Information about Agriculture to Young Spanish Urbanites (Maldita Agricultura: Promoviendo información confiable acerca de agricultura para jóvenes urbanos españoles), cofinanciado por la Unión Europea, con el objetivo de aumentar el conocimiento y reducir la desinformación entre la población urbanita, sobre todo la menor de 30 años, sobre agricultura, producción de alimentos y entornos rurales, y específicamente sobre la Política Agraria Común (PAC). 

Durante un año, a través de artículos explicativos, desmentidos y reportajes de datos en profundidad el proyecto busca acercar a ese público la realidad del sector agrícola, la producción, transformación, transporte y distribución de alimentos, la conservación del medio ambiente, la innovación y desarrollo en el sector de la alimentación, los esfuerzos por reducir el desperdicio alimentario y la información al alcance de los consumidores. 

A partir de esos contenidos y su consiguiente distribución a través de sus perfiles en redes sociales, el departamento educativo de la Fundación Maldita.es elaborará también contenidos educativos enfocados a su misión de aumentar la alfabetización mediática y fomentar un consumo de información más seguro y responsable. 

¿ Quién financia y cuánto dinero recibe Maldita.es para llevar a cabo este proyecto?

Maldita Agricultura: Promoting Reliable Information about Agriculture to Young Spanish Urbanites es un proyecto cofinanciado (60%) por la Comisión Europea a través del programa IMCAP (information measures relating to the common agricultural policy, política sobre medidas informativas en relación a la política agraria común) y recibirá €92.387,65.

 Proyecto: 101172465

Las opiniones y puntos de vista expresados solo comprometen a su(s) autor(es) y no reflejan necesariamente los de la Unión Europea. Ni la Unión Europea ni la autoridad otorgante pueden ser considerados responsables de ellos.