En Maldita.es hacemos públicas las inspecciones higiénico-sanitarias de las piscinas y balnearios de Madrid, que lleva a cabo el organismo municipal encargado de las políticas de salud pública, Madrid Salud. Desde 2018, y hasta octubre de 2019, han visitado 799 piscinas distintas y el 23,78% suspendieron.
Las piscinas pueden acabar con tres resultados posibles: favorable, favorable condicionado o desfavorable. De enero de 2018 a octubre de 2019 suspendieron su última visita de Madrid Salud (o lo que es lo mismo: fueron calificadas de desfavorables) 190 piscinas: el 23,78% de las inspeccionadas. La mayoría de las inspeccionadas son las de comunidades de vecinos. En cambio, las piscinas eróticas, como saunas o clubs de swingers, son las que más suspenden.
Los datos obtenidos por Maldito Dato a través de la Ley de Transparencia revelan por primera vez cuáles son las piscinas que no aprueban las inspecciones de sanidad en una ciudad española. Algo muy parecido, además, a lo que ya hicimos con los bares y restaurantes de Madrid.
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METODOLOGÍA
Maldito Dato ha creado una base de datos, que ha sido la analizada para esta información, de las inspecciones a piscinas y balnearios de Madrid, tras obtener la información a través una de petición de acceso a la información pública realizada a Madrid Salud utilizando la Ley de Transparencia. Además, se solventaron distintos tipos de errores en el dataset con OpenRefine y se geolocalizaron a través de la librería Python Geocoder.
Cada registro de la base muestra los resultados de una inspección distinta. Además, se han añadido las piscinas que aparecen en la base de datos de piscinas municipales de Madrid y las privadas que constan en el censo de locales y actividades del ayuntamiento para poder conocer qué piscinas no han sido inspeccionadas por Madrid Salud al menos desde 2018.
Para poder analizar qué tipos de piscinas son las que más suspenden las hemos clasificado en nueve categorías distintas: piscinas de colegios, de universidades, residencias de estudiantes o colegios mayores; de clínicas, centros de personas con discapacidad o dependencia, residencias para la tercera edad o centros de educación especial (lugares sociosanitarios); de comunidades de vecinos; de administraciones públicas; de hoteles, apartamentos turísticos o restaurantes; de centros de natación, gimnasios, espacios de fitness o wellness u otros tipos de centros deportivos; spas o balnearios; y, por último, piscinas eróticas. En la categoría de administraciones públicas, además, hemos utilizado dos subcategorías: municipales y de otras administraciones públicas.
Además, hay que puntualizar que las piscinas de centros deportivos o gimnasios, por ejemplo, que se encontraban dentro de hoteles o apartamentos las hemos contado dentro de esta última categoría. Igual que los balnearios o spas que formaban parte de otras instalaciones como pueden ser hoteles o centros deportivos también los hemos categorizado dentro de estos últimos apartados.
Los datos facilitados por Madrid Salud y, por lo tanto, los que aparecen en la base de datos construida por Maldito Dato sólo reflejan la última inspección realizada a cada piscina o balneario urbano desde 2018. Excepto cuando un negocio tenga licencia en más de un epígrafe de actividad, como puede ser el de spas y balnearios urbanos, el de piscinas climatizadas de uso público o el de piscinas de uso público de temporada. En ese caso pueden haber habido inspecciones distintas para cada actividad y así lo recoge la base de datos.
El conjunto de datos también incluye el detalle de si ha habido incumplimientos en las distintas categorías que se analizan en cada inspección y se puede consultar y descargar aquí. En ella constan datos como, por ejemplo, el nombre de la piscina, la dirección geográfica, el tipo de piscina que es, la clase de actividad que realiza según su epígrafe, la fecha de la inspección o el resultado de esta.