MENÚ
LAS CLAVES
- El porcentaje de españoles que apoyaba la democracia frente a que una sola persona tuviera la autoridad fue el mayor desde que el CIS lo preguntaba.
- El 40% de los encuestados veían a Tejero como un valiente y sólo el 16% como un delincuente.
- Más de la mitad de los encuestados declararon haberse ido a dormir más tarde de la 1 de la madrugada esa noche.
- El intento de golpe de Estado coincidió con la mejor valoración de Calvo-Sotelo de la historia. El Gobierno también vio cómo crecía su apoyo.
Este 23 de febrero se cumplen 40 años desde que se produjo el golpe de Estado fallido del 23F de 1981, el mismo tiempo que pasó entre el inicio de la Guerra Civil con el levantamiento militar de 1936 y la muerte de Franco en 1975.
Para este aniversario, Maldita.es ha querido comprobar si las opiniones de los españoles en temas como la valoración de la democracia o de los líderes políticos variaron tras el intento de golpe de Estado de Antonio Tejero a partir de los datos de los barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de 1980 y 1981.
Mayor apoyo a la democracia justo después del intento de golpe de Estado
El primer estudio del CIS que realizó su trabajo de campo después del 23-F fue el de marzo de 1981. En aquella encuesta se alcanzó un récord histórico con más gente diciendo que prefería la democracia frente a una dictadura: el 79%. Desde que se preguntaba (junio de 1979) nunca se había alcanzado tal porcentaje.
Concretamente, la pregunta decía: “¿Cree usted que es mejor que una sola persona tenga toda la autoridad y decida por nosotros o que las decisiones políticas las tome un grupo de personas elegidas por todos los ciudadanos?”. Ese máximo no se superó hasta noviembre del mismo año (ocho meses después) cuando llegó hasta el 80% de españoles prefiriendo un sistema democrático.
Otra pregunta que hacía el CIS en los años 80 era si la gente creía que la democracia iba a solucionar los problemas de nuestro país. Justo después del golpe fallido la respuesta positiva a esta pregunta alcanzó máximos con respecto a los meses anteriores, con un 35% de encuestados que creían que la democracia iba a solucionar los problemas de España.
Además, en marzo de 1981 el índice de personas que respondía que “los problemas van a ir a peor” con la democracia también alcanzó mínimos históricos: sólo el 14% de los encuestados. Hasta febrero de 1982, casi un año después, en el primer aniversario del 23-F, no volvió a haber un porcentaje tan bajo de gente que pensara que los problemas de España se iban a acrecentar con la democracia.
Había más españoles que pensaban que Tejero era "un idealista" y "una persona con buena intención, pero equivocada" que "un delincuente" o "un cobarde"
Aunque después del 23-F el CIS recogía muy buenos datos en el apoyo y la confianza en la democracia, esto no se tradujo en una condena o repulsa por parte de los encuestados a la figura de Antonio Tejero.
Hubo que esperar al estudio de abril para saber la opinión de la ciudadanía sobre el golpe fallido del 23-F, aunque en marzo también hubo barómetro del CIS.
En esa encuesta de abril los ciudadanos definían a Tejero como un idealista (40%), un valiente (31%) y una persona con buena intención, pero equivocada (35%). Sólo el 16% de los encuestados estaban de acuerdo con que era un delincuente y un 10% con que era un cobarde.
Más de la mitad de los españoles se fueron a dormir después de la 1 de la madrugada
Se hicieron dos preguntas sobre el tema: a qué hora se durmieron los españoles ese día y, la citada anteriormente, sobre si estaban de acuerdo con alguno de los adjetivos que el encuestador decía para definir a Tejero. Con respecto a la de la hora, más de la mitad de los encuestados (51%) se durmió después de la 1 de la madrugada y sólo el 29% lo hicieron antes de esa hora. Incluso un 9% de los españoles declaró no haber dormido nada.
Casi el 40% de los españoles creía que los golpistas obtendrían una pena menor de la que se merecían
También se preguntó por cuál debería ser la pena para Antonio Tejero en febrero de 1982, un año después y cuando comenzó el juicio por el intento del golpe de Estado. Casi un tercio de los encuestados pensaban que sería justa una pena de 30 años de cárcel, pero pensaban que se le impondría una menor.
Este mismo estudio preguntó a los españoles si pensaban que a los acusados del juicio se les impondría una pena justa o injusta. Casi el 40% de los españoles opinaba que obtendrían una pena menor de la que se merecían.
Finalmente, y a pesar de las dudas que albergaban muchos españoles, Antonio Tejero fue condenado a un total de 30 años de prisión, como ya explicamos en Maldita.es.
La valoración de Suárez, Calvo-Sotelo y Fraga mejoró tras el 23-F mientras que la de González y Carrillo empeoró
El CIS de marzo de 1981 también preguntó por la valoración de los líderes de los principales partidos políticos. Leopoldo Calvo-Sotelo, Adolfo Suárez y Manuel Fraga aumentaron con respecto a los meses anteriores, y Felipe González y Santiago Carrillo disminuyeron.
De hecho, Calvo-Sotelo obtiene en este barómetro su mejor nota de toda la historia (5,6) y Suárez sube después de que su valoración hubiera bajado en sus últimos meses de Gobierno. Esto no tiene por qué estar relacionado con el 23-F, ya que en la misma época hubo otros eventos como la propia investidura de Calvo-Sotelo como presidente del Gobierno.
Quien también aumentó su popularidad fue el Gobierno, que en los barómetros anteriores vio cómo su popularidad iba bajando. Luego, en los meses posteriores al golpe de Estado, esta popularidad volvió a disminuir. Vivieron una especie de momento ‘luna de miel’. En ese CIS de marzo tras el 23-F subieron tanto los españoles que valoraban al Gobierno positivamente como los que lo valoraban regular. En cambio, bajaron quienes lo valoraban negativamente.
Primera fecha de publicación de este artículo: 23/02/2020
