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En los últimos días están circulando varios contenidos que aseguran que el Gobierno habría retirado recientemente la vacuna de AstraZeneca por “defectuosa, tóxica y mortal”. Pero estas afirmaciones reproducen un contenido que, en realidad, es de 2021 y trata sobre el fin del contrato entre España y AstraZeneca, que en ningún caso se dio porque el fármaco fuera “mortal” sino porque el Ejecutivo consideró que ya había dosis suficientes para el sector de la población al que estaba destinado su uso.
Sanidad suspendió temporalmente la vacunación con AstraZeneca en 2021 pese a la recomendación de la Agencia Europea del Medicamento y la reanudó diez días después
Los contenidos que circulan aseguran que el Gobierno de España ha retirado, después de “1 año y 8 meses”, la vacuna de AstraZeneca por ser “defectuosa, tóxica y mortal”.
Pero como os explicamos en Maldita.es, fue el 16 de marzo de 2021 cuando Sanidad decidió suspender temporalmente la vacunación de AstraZeneca después de que la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) encontrara “posibles vínculos” entre el fármaco y algunos casos muy poco frecuentes de trombos sanguíneos con bajo número de plaquetas y que deberían incluirse como "efectos secundarios muy raros" de la vacuna.
La decisión de Sanidad contradecía la recomendación de la EMA de seguir administrando este fármaco, ya que los beneficios generales seguían siendo mucho mayores que sus riesgos. Finalmente, Sanidad informó de que reanudaría la vacunación a partir del miércoles 24 de marzo de 2021.
La EMA, en una nota publicada el 23 de abril, continuaba aconsejando su aplicación, ya que los beneficios seguían superando los posibles riesgos. Ahora bien, tras comprobar que las comunidades autónomas tenían dosis suficientes para administrar este fármaco en el grupo de edad de 60 a 69 años, Sanidad decidió no renovar más contratos con la farmacéutica. Además, Sanidad aseguró que, en caso de que fuera necesario, el ministerio no estaba cerrado a solicitar el suministro de más dosis de este fármaco para finalizar la vacunación en ese grupo etario.
En una actualización de junio de 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) insiste en que la vacuna es segura.
La difusión de estos contenidos coincide con la difusión de una entrevista con Reuters del director ejecutivo de AstraZeneca, Pascal Soriot, en la que dijo lo siguiente sobre su posible negocio de las vacunas contra la COVID-19: “No puedo estar seguro de que si estaremos en eso o no”.
Mensajes que difunden contenidos de 2021 como actuales
Estos mensajes acompañan una captura de una noticia titulada “los motivos por los que Sanidad retira para siempre AstraZeneca”.
Pero este contenido no es de agosto de 2022, sino que fue publicado por Diario Sur en el mismo mes de 2021.
En él, aunque se emplea el verbo “retira”, el texto trata sobre la decisión de Sanidad de no renovar ningún otro contrato con AstraZeneca después de certificar que ya había dosis suficientes para administrar esta vacuna a la población de entre 60 y 69 años, sector al que iba dirigida.
Por lo tanto, es un bulo que el Gobierno haya retirado ahora la vacuna de AstraZeneca por “defectuosa, tóxica y mortal”. Se trata de un contenido de 2021 y el medicamento no se retiró por cuestiones de salud, sino que no se renovó el contrato con la farmacéutica.porque ya había dosis suficientes para el sector de la población a la que estaba destinado su administración.
Cambios en las franjas de edad para administrar AstraZeneca
El fármaco de AstraZeneca iba a estar dirigido en España en un primer lugar a la población de entre 18 y 55 años por la falta de datos de efectividad en mayores de 55 años en los primeros estudios que se lanzaron sobre la vacuna, pese a que la OMS no veía razones para no administrarla a mayores de 65 años. Finalmente, con la publicación de nuevos datos de eficacia en esta franja de edad, se amplió la franja de vacunación con AstraZeneca hasta los 65 años.
Siguiendo la estrategia de vacunación, se comenzó a vacunar con AstraZeneca a las personas de entre 65 a 55 años de edad, empezando por las personas nacidas en 1956. Pero la estrategia también incluía la administración de este fármaco a colectivos con una función esencial para la sociedad (Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Emergencias y Fuerzas Armadas, así como profesores de infantil a secundaria) y personas dependientes.
Con la sospecha de que la aparición de estos episodios trombóticos eran más frecuentes en personas jóvenes, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaron el 7 de abril limitar la aplicación de AstraZeneca únicamente para el grupo etario de 60 a 65 años, que posteriormente se amplió hasta los 69 años el 8 de abril.
Este cambio dejaba en la incertidumbre a aquellos menores de 60 años que ya habían recibido una primera dosis de AstraZeneca. La Comisión de Salud Pública acordó en un primer lugar dilatar la aplicación de esta segunda dosis de 12 a 16 semanas, a la par que el Instituto de Salud Carlos III estudiaba la efectividad del uso combinado de las vacunas de AstraZeneca y Pfizer a través del estudio CombivacS.
Finalmente, los resultados publicados el 18 de mayo mostraban que el uso de combinado de las vacunas de AstraZeneca y Pfizer no perdía eficacia, por lo que la Comisión de Salud Pública acordó ese mismo día aplicar a los menores de 60 años la segunda dosis con Pfizer, o recibir la segunda dosis de AstraZeneca si firmaban un consentimiento informado.
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