El 14 de septiembre el Consejo de Ministros acordó varias medidas para abaratar el precio de la luz en España, que ha marcado varios máximos históricos en 2021, como ya hemos explicado en Maldita.es
Una de las medidas por la que nos habéis preguntado en nuestro servicio de Whatsapp +34 644 229 319 es por los beneficios que van a dejar de recibir las centrales de generación eléctrica. Según la referencia del Consejo de Ministros del 14 de septiembre esta medida supondrá que las empresas dejen de ganar 2.600 millones de euros hasta marzo de 2022. Sólo afectará a las centrales no emisoras de gases de efecto invernadero con una potencia superior a 10 megavatios (MW).
Este dinero tendría su origen, según ha explicado el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a Maldita.es, en la “minoración temporal de la actividad de producción eléctrica de un modo proporcional al precio del gas”. Es decir, que cuando el precio del gas supere un límite las empresas de generación de energía que no usen combustibles fósiles tendrán que trasladar parte de sus beneficios al Gobierno.
Ese importe está marcado en 20 euros el megavatio, como especifica el decreto ley que recoge las medidas para reducir la factura de la luz [art.7]. Los meses que se supere, las generadoras de energía deberán devolver una cantidad de dinero a un fondo gestionado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, como explica Europa Press. Después, lo que se recaude se destinará a ajustar la factura de la luz que tienen que pagar los españoles desde septiembre de 2021 hasta marzo de 2022 [art. 9].
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha asegurado a Maldita.es que “no está prevista la devolución de los beneficios a las instalaciones a las que se detraen los ingresos”. Es decir que, según el Gobierno, el dinero se utilizará para reducir el importe de la factura de la luz y después no se le devolverá a las empresas.
Las generadoras de energía hidroeléctrica y nuclear estaban obteniendo beneficios extra porque cobraban el mismo precio que si estuvieran usando gas
En España desde 1998 el precio de la electricidad depende del que tiene el gas: es decir, que cuando sube el precio del gas también sube el del resto de energías. Como ahora el precio del gas ha subido a nivel internacional también lo ha hecho el precio al que la venden las energías hidráulica y nuclear sin que aumenten sus costes de producción. Debido a esto estaban ganando más beneficios.
“El hecho de que estas tecnologías estén cobrando mucho más por los mismos costes se ha estado reflejando en el precio del mercado minorista”, aclara el experto en el sistema eléctrico español e ingeniero industrial Jorge Morales de Labra, director de Próxima Energía “y ha tenido efectos directos en la factura de la luz, ya que la han cobrado como si costara lo mismo generarla que la que proviene de la quema de hidrocarburos”.
Este es el motivo por el que se ha creado esta medida: se les quita parte de estos beneficios (que según la referencia del Consejo de Ministros son “extraordinarios, sobrevenidos súbita e inesperadamente”), porque estaban ganando más debido a la subida del precio del gas cuando no les afecta a la hora de generar su electricidad.