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Por qué hay películas o vídeos en servicios de streaming que no puedo ver desde mi país

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La gran mayoría de contenido audiovisual que podemos disfrutar en Internet está sujeto a derechos de autor. Ya sea en Netflix, Filmin, HBO o Movistar+, las películas o las series que vemos en estas plataformas han pasado por un proceso de negociación en el que se ha decidido en qué países se puede ofrecer el contenido y bajo qué condiciones. De ahí viene el conocido aviso ‘Vídeo no disponible en su zona geográfica’ que, seguramente, ya hayas visto más de una vez.

Cómo se decide qué contenidos se muestran en un país y cuáles no

El proceso tradicional de negociación es el siguiente: las productoras, encargadas de gestionar los derechos de explotación de películas y series por las que han apostado, se sientan con las distribuidoras para fijar un precio, la cantidad de cines o televisiones en las que se emitirá y durante cuánto tiempo. También los países en los que tendrán derechos para emitir. Con las plataformas online el proceso es exactamente igual. Los titulares de los derechos de las obras pueden negarse a que un servicio de streaming emita su película en un país porque, por ejemplo, ya tiene acuerdos con otra plataforma.

Carmen Álvarez, abogada especializada en derechos de autor en el bufete Art&Iure, explica a Maldita.es que “la posibilidad de que se pueda visualizar una película en otro país dependerá del ámbito territorial acordado” entre las plataformas online y los propietarios de los derechos.

“Puede ser que el titular de la obra sólo haya cedido sus derechos para un determinado país o zona geográfica, de ahí que el acceso sea restringido aún habiéndolo contratado en su país de origen”, añade la letrada.

Condiciones de uso de Netflix en materia de traslado a otro país.

El caso de YouTube

En el caso de YouTube la situación es ligeramente diferente. Fuentes de la plataforma explican que, en su caso, el portal no decide el alcance de los vídeos que se suben a sus servidores. “Es el dueño de los derechos del vídeo en cuestión el que decide en cuántos países se ve”, aclaran. Ya sea el propietario de estos derechos el creador del vídeo o, como en el caso de las películas, una empresa que actúe a modo de intermediaria.

Si nos salimos un poco de los ejemplos relacionados con el cine, en YouTube, competiciones deportivas como LaLiga o la NBA pueden decidir en qué países se pueden ver los contenidos generados en sus canales, como por ejemplo los resúmenes de los partidos. Al ser los propietarios de los derechos, en su mano está dar luz verde a la emisión de contenidos en distintas zonas geográficas, aunque estos no sean de pago.

Una vez repasado el aspecto legal, surge otra pregunta desde el punto de vista del usuario. ¿Y cómo saben estas plataformas que estoy viendo una serie de su catálogo desde un país que no tiene los derechos para emitirla? Es a través de tu dirección IP, esa matrícula digital que identifica tu dispositivo y el origen de la conexión siempre que navegas por internet. Hay páginas en las que puedes identificar cuál es la IP desde la que te conectas.

Para estar seguros, mejor leernos las Condiciones del Servicio

Además de los acuerdos concretos en películas y series, es posible que las plataformas tengan algún tipo de restricción geográfica que no te permita disfrutar del servicio si te mudas de país. Para comprobarlo hay que acudir a sus condiciones de uso y servicio. Netflix ofrece la posibilidad de ver sus contenidos desde otras partes del mundo, aunque recordando que “el contenido en streaming y las descargas que elijas pueden variar de un país a otro” por motivos de derechos de emisión, tal y como te explicamos arriba.

Para Filmin, HBO o Movistar+, la situación es similar, aunque siempre que sea dentro de las fronteras de la Unión Europea. En un principio, los contenidos para estas plataformas estaban restringidos al país en el que pagabas. Si te movías por el extranjero, estabas obligado a darte de alta en el nuevo país de destino.

La cosa cambió en 2018 a nivel europeo con el acuerdo de las nuevas normas del Mercado Único Digital. Uno de los puntos que se aprobó fue la posibilidad de que los ciudadanos europeos puedan “utilizar plenamente sus abonos a servicios en línea de películas, deportes, libros electrónicos, juegos de vídeo o música” dentro de otros países de la UE.

De todas formas, cada plataforma tiene una política diferente en función de lo larga que sea esta estancia en el extranjero. Además, pueden reservarse el derecho a no prestarte el servicio en caso de que comprueben que estás accediendo a él de forma permanente desde otro país. En los términos y condiciones de Filmin lo recogen así: “Los clientes podrán acceder y utilizar los servicios de Filmin cuando se encuentren temporalmente en otros estados miembros de la Unión Europea. (...) En aquellos casos en los que otro estado miembro se convierta en residencia permanente del cliente, este deberá darse de baja y acceder a los servicios ofertados para ese estado miembro”.


Primera fecha de publicación de este artículo: 11/06/2021

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