Lo que sabemos: El Ministerio de Sanidad publicó en su cuenta oficial de Twitter (ahora X) el 5 de agosto de 2025 que, en julio, hubo “1.060 fallecidos por altas temperaturas”, lo que supone “un 57% más que el año pasado”. Tras ser consultados por Maldita.es, remitieron un enlace del Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo), que no hace referencia a los registros de fallecimientos concretos y sus causas, sino a estimaciones de “las desviaciones de mortalidad diaria observada con respecto a la esperada según las series históricas de mortalidad”. Este sistema se creó para reducir el impacto de las altas temperaturas en la salud de la población y permite estimar de forma indirecta el impacto del calor extremo y “cualquier evento de importancia en salud pública”.

El Ministerio de Sanidad remite a una explicación del sistema MoMo, pero no da explicaciones sobre la afirmación en X
Preguntado al respecto por Maldita.es, el ministerio remite a una página web de la institución en la que se explica qué es y cómo funciona el sistema MoMo, del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). En desviaciones de mortalidad diaria observada, para julio el sistema da el dato de 1.060 pero, como decimos, esto no es un registro de muertes por calor, ni recoge los fallecimientos concretos y sus causas, sino una estimación. Desde el ministerio no aclaran por qué en X hacen referencia a esos supuestos “1.060 fallecidos en julio por altas temperaturas”.
Es decir, que aunque se sabe que el calor extremo aumenta el número de muertes, sobre todo al agravar enfermedades previas, no se puede decir que en julio de 2025 los fallecimientos hayan sido exactamente 1.060.

El sistema MoMo “hace estimaciones estadísticas de excesos de mortalidad para un día determinado comparando series históricas”, indicaban desde el ISCIII a Maldita.es. Así, “se calcula e infiere valores relativos a todas las causas y atribuibles a temperatura, no números exactos de defunciones”.
Como añadía el ISCIII, estas cifras “no son personas fallecidas (no es un registro de defunciones concretas), sino el cálculo estadístico de la estimación del exceso de mortalidad” que se atribuye al exceso de temperaturas.