Tras la DANA ocurrida en Valencia el pasado 29 de octubre y a raíz de los estragos que esta ha generado, el Ministerio de Sanidad ha publicado recomendaciones para disminuir el riesgo de infecciones, contaminaciones alimentarias y otros problemas de salud. Entre las advertencias recuerda que, debido a la acumulación de agua en las zonas afectadas, se ha creado un ambiente propicio para la reproducción de mosquitos.
Hay mosquitos capaces de transmitir enfermedades
Entre las maneras en las que un microorganismo patógeno puede transmitirse de persona a persona y, con ello, contagiar la enfermedad que este causa es a través del picotazo de ciertos insectos, como los mosquitos. De ahí las recomendaciones dirigidas a extremar la precaución en lugares donde existen enfermedades endémicas que puedan servirse de estos animales para propagarse.
En España, se han detectado más de 60 especies de mosquitos. Aunque la mayoría de ellas son nativas (es decir, habituales en determinadas regiones o ecosistemas del país), esto no ocurre con todas: “la cifra incluye tres especies invasoras que llegan desde otra parte del mundo, transportadas por personas que viajan, en vehículos o por plantas o neumáticos usados”, explica desde Science Media Center España (SMC) Roger Eritja, biólogo experto en entomología. Estas tres especies son Aedes aegypti (mosquito de la fiebre amarilla, originario de África), Aedes albopictus (mosquito tigre, originario de Asia) y Aedes japonicus.
¿Qué tiene que ver la DANA con los mosquitos?
Como explica el Ministerio de Sanidad, las lluvias torrenciales han dejado una importante acumulación de agua en las zonas afectadas por la DANA y, por lo tanto, un ambiente propicio para la reproducción de mosquitos.
Entre las especies de estos insectos observadas en la Comunidad Valenciana se encuentra precisamente el mosquito tigre, “que puede actuar de transmisor de enfermedades como el virus del Chikungunya, dengue y el virus del Zika”, según señala la Generalitat Valenciana en su página web. Ahora bien, añade que hasta la fecha no se ha producido ningún contagio de estas enfermedades en la Comunidad Valenciana.
“Todos los casos descritos en nuestra comunidad han sido contagiados en otros países. Sin embargo, la presencia de un vector capaz de transmitir estas enfermedades (el mosquito tigre) en nuestro territorio y en otras comunidades autónomas españolas, requiere la puesta en marcha de los mecanismos de control y prevención adecuados”, continúa.
Recomendaciones para evitar problemas con mosquitos (y otros animales)
Desde el Ministerio de Sanidad y de cara a reducir o evitar los problemas derivados del aumento de mosquitos en las zonas afectadas por la DANA, recomiendan:
Eliminar el agua estancada y vaciar o cubrir los recipientes que puedan acumularla, como cubos, bidones o macetas.
Proteger los alimentos, guardando la comida en lugares limpios y a salvo de roedores.
Desechar cualquier alimento que haya estado en contacto con el agua de las inundaciones.
Prestar atención a la gestión de la basura, depositándola en bolsas cerradas dentro de los contenedores. En caso de no haber contenedores disponibles, desde el ministerio recomiendan dejarla lo más lejos posible de nuestra vivienda.
Usar mosquitera en puertas y ventanas.
Protegerse de las picaduras a través de ropa que cubra la mayor parte de la piel y aplicando repelente de mosquitos en las zonas expuestas.
Desde el Ministerio de Sanidad y el CSIC recomiendan usar la aplicación Mosquito Alert
Ante la posibilidad de que los ayuntamientos de la zona afectada por la DANA puedan verse sobrecargados por el aumento de registros de posibles afectaciones, desde el Ministerio de Sanidad proponen el uso de la aplicación gratuita ‘Mosquito Alert’ como una vía complementaria para recopilar información de manera ágil y eficaz. Esta herramienta permite reunir, centralizar y compartir información sobre picaduras y otros datos relacionados con la presencia de mosquitos.
A través de esta aplicación y como explican desde el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), “cualquier persona puede enviar observaciones de mosquitos, de sus lugares de cría y de picaduras”. Después, “un equipo humano de entomólogos expertos se encarga de validar las fotos recibidas y notificar el resultado al participante”. “Los datos generados son útiles para la ciencia, permitiendo estudiar la distribución geográfica de estas especies, así como su estacionalidad a lo largo del año”, añaden.