MENÚ
MALDITA CIENCIA

El vídeo que alerta de marcas de ropa con sustancias tóxicas que supuestamente superan los límites seguros para la salud: qué riesgos hay y en qué se basa

Publicado
Claves
  • Un vídeo alerta de que ciertas marcas de ropa venden prendas que “envenenan la sangre”: se basa una investigación periodística en Canadá que identificó sustancias químicas que exceden los límites legales en algunos países
  • Las sustancias detectadas en prendas de varias marcas, entre ellas Shein, tienen efectos perjudiciales en la salud humana pero no riesgo directo de muerte, según los expertos consultados por Maldita.es
  • Aunque la fabricante Shein señaló que había dejado de vender estos productos, el contenido asegura que aún se pueden comprar desde ciertos lugares de América Latina. En respuesta a Maldita.es, Shein no aclara si esto es cierto

Comparte
Etiquetas

Circula un vídeo cuyo contenido advierte y alerta de que hay ropa que, supuestamente, “envenena la sangre”. Esta afirmación, dice, se basa en unas investigaciones periodísticas a partir del análisis de varias prendas de ropa, entre ellas la marca Shein, que detectaron componentes (como plomo y ftalatos) por encima de los niveles legales establecidos en algunos países. En el vídeo se afirma que estas sustancias están presentes en cantidades capaces de provocar infertilidad, cáncer y hasta la muerte en ropas que se venden en ciertos países, como México. 

Vestir habitualmente con prendas de ropa en cuya composición se observan sustancias como estas en cantidades por encima de los límites de seguridad fijados por las autoridades sanitarias sí supone un riesgo para la salud a largo plazo, según los expertos consultados por Maldita.es. Ahora bien, también señalan que su concentración en una prenda concreta queda lejos de provocar una muerte directa por su ingesta.

En respuesta a Maldita.es, Shein no aclara si sigue vendiendo los productos que superan los límites legales de un país en territorios con límites más laxos o sin ellos.

Una investigación periodística detectó que algunas prendas superaban el límite legal de sustancias químicas en Canadá 

El argumento que el vídeo utiliza para hacer estas afirmaciones es una investigación periodística de la radiotelevisión pública de Canadá, CBC, publicada en octubre de 2021. Esta concluía que de 38 productos adquiridos en “gigantes de la moda rápida”, uno de cada cinco (es decir, entre siete y ocho de los 38) contenía niveles elevados de sustancias químicas como plomo, ftalatos y PFAS (químicos sintéticos que se acumulan a lo largo del tiempo en los seres humanos y en el medio ambiente).

Uno de los ejemplos mencionados es una chaqueta de la marca Shein que contenía casi 20 veces la cantidad de plomo que se considera segura en niños, según la autoridad sanitaria canadiense.

Como respuesta, Shein comunicó a la CBC su decisión de retirar las prendas que excedían la cantidad máxima permitida de ciertas sustancias químicas en Canadá y su intención de dejar de trabajar con los proveedores responsables hasta que el problema se resolviera. El vídeo señala, sin embargo, que aunque esas prendas ya no se comercializan en Canadá, basta con conectarse a la tienda online desde otro lugar, como México, para comprobar que su compra sigue siendo posible desde América Latina.

Greenpeace también encontró sustancias químicas en cantidades superiores a los límites comunitarios en prendas de Shein vendidas en la Unión Europea

En 2022, Greenpeace analizó la composición química de 47 prendas de la marca Shein en un “laboratorio independiente”. Los resultados apuntaron que siete de ellas contenían cantidades de sustancias químicas consideradas peligrosas por encima de los límites reglamentarios de la UE. Otras 15 se encontraban “cerca de los valores considerados como tope”.

Preguntados al respecto, desde Shein señalan a Maldita.es que ante “cualquier reclamación o problema”, la marca retira “de inmediato los productos” de su página como “medida de precaución”, mientras se llevan a cabo las investigaciones internas correspondientes. 

Si se verifica el incumplimiento, añaden desde Shein, no dudan “en tomar las medidas de seguimiento adecuadas”, sin aclarar si eso supone retirarlo del mercado definitivamente en todo el mundo o si continúan comercializando esas prendas en otros países.

“Tanto nuestros proveedores como los vendedores de Shein Marketplace deben cumplir con el código de conducta establecido en los acuerdos y políticas correspondientes de Shein, además de acatar las leyes y normativas aplicables en los países en los que operamos”. De nuevo, esta respuesta no aclara si la marca sigue vendiendo los productos retirados en Canadá en otros países como México.

Los impactos de ciertos productos químicos en la ropa

En base a la evidencia científica, es cierto que la exposición al plomo puede tener efectos nocivos en el cerebro, los riñones y el sistema nervioso y que un nivel bajo puede provocar problemas de desarrollo en niños y en embarazadas, al atravesar la placenta y llegar al feto. Además, como menciona el vídeo, la exposición a niveles altos puede causar “vómitos, diarrea, convulsiones e incluso la muerte” y destaca riesgos para la salud y el medioambiente de otras sustancias presentes en ciertas prendas de ropa, como los ftalatos y los PFAS. 

Aunque “está lejos de la realidad que una persona pueda llegar a morir por vestir una cazadora”, la narrativa del vídeo “es bastante ajustada a la realidad”, según señala a Maldita.es Miguel Ángel Sogorb, profesor de Toxicología de la Universidad Miguel Hernández y maldito que nos ha prestado sus superpoderes. Myriam Catalá, profesora de Biología Celular en la Universidad Rey Juan Carlos, añade que “no existe dosis segura de exposición a plomo por su mecanismo carcinogénico” (produce cáncer).

De ahí que vestir habitual o esporádicamente con prendas que contienen sustancias químicas por encima de los límites de seguridad fijados por las autoridades sanitarias suponga un riesgo para la salud del individuo, “especialmente en el caso de la infancia, mujeres embarazadas y personas vulnerables por otros motivos”, señala Catalá. La experta añade que, para poder conocer la relación real entre el uso de este tipo de ropa y los niveles bioacumulados de estas sustancias, ”sería necesario realizar tanto un análisis de los niveles reales en la ropa, como un estudio de biomonitorización humana”.

El problema es la exposición crónica, no un peligro de muerte directa por exposición puntual o ingesta

Ahora bien, en palabras de Sogorb, afirmar que una sustancia puede causar la muerte “es lo mismo que no decir nada”: “De cualquier sustancia química existen concentraciones potencialmente letales. La única manera de que el plomo, los PFAS o los ftalatos puedan ser letales es coger el bote de la sustancia pura e ingerirlo”.

Es decir, se trata de un situación “muy lejana al escenario de exposición en el que una persona se pone una cazadora (normalmente nunca directamente sobre la piel, sino sobre otras prendas) o en el que un niño chupa una prenda textil, una cremallera o un botón”: “Aunque el lamido de las prendas se pueda dar con una frecuencia relativamente alta, la cantidad total ingerida en cada exposición siempre va a estar muy alejada de la cantidad que se tendría que ingerir para que sea letal”, aclara Sogorb.

Esto es diferente a la exposición crónica a bajas concentraciones, como las que se supone que puede aparecer en niños y adultos por la utilización de estos productos de consumo: “En la Unión Europea una concentración máxima de 0,05% de plomo en productos que pueden meterse en la boca de niños es un valor máximo que garantiza que la posible migración desde la prenda a la boca del niño no suponga alcanzar concentraciones de plomo peligrosas para el desarrollo”, explica el experto.

Para Sogorb, lo más preocupante es cómo el plomo y PFAS se incorporan al medioambiente como consecuencia de los lavados de las prendas que los contienen. Además, las fibras sintéticas que se liberan al lavar la ropa son una fuente de microplásticos en el agua. “Es cierto que los tintes frecuentemente contienen metales pesados. Es una de las cuestiones por las que la industria de la moda es tan contaminante”, concluye Catalá. 

En este artículo ha colaborado con sus superpoderes Miguel Angel Sogorb, profesor de Toxicología de la Universidad Miguel Hernández; y Myriam Catalá, profesora de Biología Celular en la Universidad Rey Juan Carlos.

Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.