MENÚ
MALDITA CIENCIA

Mal aliento mañanero, diferencia entre filtros solares físicos y químicos y ejercicios de rejuvenecimiento facial: llega el 221º consultorio de Maldita Ciencia

Publicado
Comparte
Categorías
Recursos utilizados
Expertos
Superpoderes
Literatura científica
Fuentes oficiales (comunicados, bases de datos, BOE)

No prometemos un show digno de Shakira en los VMAs ni un doblaje a otro idioma, IA mediante, de nuestras propias voces. Tampoco un despliegue informativo sobre lo rápido que un contenido falso (y, ¿falseado?) puede hacerse viral en redes, ¡pero sí acompañarte un viernes más con nuestro consultorio científico! En esta edición, mal aliento matutino, ejercicios faciales, cremas depilatorias caseras y diferencias de los factores solares físicos o químicos.

¿Que Maldita Ciencia prácticamente se ha pasado internet? Puede. ¿Que quedan otras muchas preguntas por resolver? También. Eh, ojo, que la próxima puede ser la tuya: anímate y mándanosla por Twitter, Facebook, correo electrónico ([email protected]) o por nuestro chatbot de WhatsApp (¡guárdate el número! +34 644 22 93 19 y únete a nuestro canal).

¿Son útiles y seguras las cremas depilatorias caseras?

“Deja de afeitarte: te mostraré la forma más sencilla de eliminar el vello de la cara, las axilas y el cuerpo”. Las personas que deciden eliminar el pelo de la zona que sea (aunque no en todas sea recomendable) seguro que han comprobado en sus propias carnes lo dolorosos que pueden ser muchos de los métodos utilizados para la depilación: la cera, el láser, las maquinillas… Este es el contexto que utilizan ciertos contenidos en redes para promocionar mezclas caseras que actúan a modo de crema depilatoria, dicen, eliminando el pelo sin molestia alguna. ¿Son eficaces eliminando el vello estos ungüentos? Puede, en función de los ingredientes utilizados. ¿Y recomendables? Según los expertos, no: la misma reacción química capaz de deshacer (literalmente) el pelo puede ser irritante para nuestra piel. Sobre todo en mezclas, como las caseras, que no han superado controles de seguridad.

Las cremas depilatorias que compramos en establecimientos contienen sustancias en su composición que, en conjunto, provocan una reacción química que rompe los enlaces de disulfuro de la queratina del pelo, la proteína que forma su capa más externa. “Cuando se rompen estos enlaces gracias a la reacción química entre un ácido y una base, entre otras cosas, el pelo se ‘deshace’, por así decirlo. Esta es la forma en la que funcionan las cremas depilatoria”, explica a Maldita.es Inés Escandell, dermatóloga y maldita que nos ha prestado sus superpoderes.

Estas sustancias están reguladas. “Es decir, según la legislación europea, existe un máximo permitido para su uso, al tratarse de ingredientes muy irritantes”, recuerda la experta. Además, se establecen los controles pertinentes en base a una concentración determinada de la sustancia y durante un tiempo de exposición determinado.

¿Qué ocurre con estas versiones caseras? También utilizan esta reacción química, así que podrían funcionar. El problema es que incluso las fórmulas de las cremas depilatorias comercializadas son muy irritantes y pueden generar dermatitis irritativa, entre otras reacciones, algo mucho más probable si las mezclas las hemos hecho en casa y no han pasado ningún control.

“Por eso [las cremas comerciales] están tan controladas y la cantidad de los ingredientes es tan importante”, señala Escandell. De ahí que preparar una mezcla casera de este tipo queriendo simular la de estos cosméticos “sea muy peligroso”: “Las concentraciones que se van a usar no van a ser las mismas. Estaríamos utilizando un producto que es corrosivo sobre nuestra piel sin que haya superado estudios de seguridad” que sí han superado las cremas disponibles en el mercado. “¿Puede ser eficaz? Sí ¿Tiene riesgo? Muchísimo, su uso está completamente desaconsejado”.

La recomendación de Escandell para evitar dañar la piel si nuestro objetivo es eliminar el pelo de una parte del cuerpo es rasurarse utilizando una cuchilla o utilizar una crema depilatoria aprobada, con ingredientes cuya concentración esté estudiada y analizada. Aun con esta última, es recomendable asegurarse de que la piel ‘tolera’ este cosmético: “Pruébala siempre primero en una zona pequeña de la piel antes de aplicarla en una zona amplia del cuerpo” y, por supuesto, “sigue las instrucciones del fabricante”, recuerdan desde WebMD en este artículo revisado por la dermatóloga Debra Jaliman. Por último y como consejo general, si sientes una sensación de quemazón en la zona donde has aplicado la crema, elimínala con agua fría inmediatamente.

¿Qué diferencia hay entre los protectores físicos o minerales y los químicos?

Sea cual sea, físico/mineral/inorgánico o químico, recuerda: usar protector solar es imprescindible para la salud (con más razón en las estaciones cálidas, pero idealmente durante todo el año). Este no va a causarte un déficit de vitamina D ni va a empeorar tu salud, sino todo lo contrario, evitará, entre otras cosas, que el riesgo de cáncer de piel aumente. Ahora bien, volviendo a las alternativas, ¿en qué se diferencian los filtros solares físicos o minerales de los químicos? ¿Son más recomendables unos u otros en función de la persona o la situación? Su diferencia radica en la forma en que cada uno de ellos protege de los rayos ultravioleta procedentes del sol y su recomendación depende de la sensibilidad de la piel en la que se aplique.

Sobre los protectores solares químicos, la Academia Americana de Dermatología (AAD) los compara con una esponja, dado que su mecanismo de funcionamiento consiste en ‘absorber’ los rayos de sol y transformarlos en otro tipo de energía que no produce daño cutáneo (térmica), como añade la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). “Contienen uno o más de los siguientes ingredientes activos: oxibenzona, avobenzona, octisalato, octocrileno, homosalato y octinoxato” continúa, y añade que suelen tratarse de formulaciones más fáciles de aplicar en la piel (muchas veces a modo de spray incoloro) sin dejar ese, a veces, incómodo rastro blanco y pastoso típico de los filtros físicos.

En cambio, los protectores solares físicos o minerales funcionan como una barrera, de forma similar a la que lo hace un escudo: normalmente, “se asientan en la superficie de la piel y reflejan los rayos del sol”. Los protectores solares físicos contienen ingredientes activos como óxido de zinc y/o dióxido de titanio y, según la AAD, son preferibles para quienes tienen una piel sensible, como los bebés, ya que no se absorben. Eso sí, como recuerdan desde Dermotheque, un sitio web escrito por dermatólogas, “la mejor manera de proteger a un niño del sol es evitándolo”.

En contextos en los que no se pueda evitar la exposición solar en los más pequeños, la recomendación de las dermatólogas es recurrir a ropa con UPF (factor de protección ultravioleta) y a los fotoprotectores solares adecuados a la edad y el tipo de piel del niño, así como reaplicarlos con frecuencia. “En menores de seis meses no se recomienda el uso de fotoprotectores solares. Entre los seis meses y los tres años deben utilizarse filtros físicos. A partir de los tres años es cuando podemos empezar a utilizar filtros químicos”, señalan. El motivo es que, en ocasiones, sus ingredientes pueden causar reacciones alérgicas o irritaciones, habitualmente en pieles sensibles, como recuerda la farmacéutica Clara Motos.

¿Por qué nos huele mal el aliento por la mañana?

¿Te has preguntado alguna vez cómo es posible tener mal aliento por la mañana con el empeño que pusiste la noche anterior en lavarte bien los dientes? Aun así, es normal: mientras dormimos, hay menos saliva en nuestra boca, lo que interfiere directamente en el olor que esta emite. Aunque, en general, nos refiramos al mal aliento como halitosis, el mañanero no entra dentro de esta categoría, al no prolongarse más allá de unos cuantos minutos tras despertarnos y lavarnos los dientes.

Sobre la halitosis, “en más del 80% de los casos el origen es la boca a raíz de una mala higiene oral”, explica a Maldita.es Simón Pardiñas, odontólogo y divulgador. Esto causa que las partículas de comida se acumulen en la superficie de la lengua, entre los dientes, en las encías… Son las bacterias que viven en la placa y el sarro las que, al descomponer las partículas de comida, “generan unos compuestos de azufre, los responsables del mal aliento”, añade el experto.

Como recuerda la revista de la Asociación Dental Americana (JAMA), la saliva ayuda a eliminar las partículas de comida de la boca. Esto supone que, además de en quienes escasea la higiene bucal, las personas con boca seca (situación que empeora al respirar por la boca, fumar y con algunos medicamentos) tengan un mayor riesgo de sufrir mal aliento. También lo empeoran algunos problemas de salud, enfermedades bucales (desde caries hasta enfermedades de las encías), heridas, la acumulación de placa (más cantidad de bacterias) y la alimentación.

Volviendo al mal aliento matinal, “este no se considera halitosis en sí misma, sino un proceso fisiológico normal, ya que durante el sueño, la producción de saliva disminuye”, señala Pardiñas. “La falta de saliva provoca que las bacterias crezcan y generen estos compuestos malolientes. Deberían desaparecer en cuanto nos levantamos y desayunamos o nos cepillamos los dientes”, señala el experto. En caso de que persista, sí podría tratarse de un caso de halitosis y la recomendación de Pardiñas sería consultar con el odontólogo.

¿Son eficaces los ejercicios faciales para rejuvenecer el rostro?

“Haciendo estos ejercicios faciales evitará arrugas, ojeras y bolsas”. “Yoga facial para ralentizar el envejecimiento”. “Redefine tu rostro y asómbrate”. Son muchos los contenidos en redes sociales que recomiendan la práctica de diferentes ejercicios faciales por su supuesta capacidad de rejuvenecer el rostro y deshacer o prevenir arrugas y otros signos relacionados con la edad. ¿Hay evidencias científicas sobre su eficacia? Estos ejercicios podrían tener un ligero beneficio en la apariencia facial, pero estos serían limitados y, en cualquier caso, no justificarían afirmaciones tan rotundas como las utilizadas en redes sociales.

Existen estudios sobre el efecto de los ejercicios faciales en el aspecto del envejecimiento. En principio, y dado que la apariencia del rostro no solo depende de la superficie de la piel (manchas, laxitud…), sino también de la grasa y el músculo bajo ella, tendría sentido pensar que ejercitar estos últimos aumentase el su volumen y, con ello, mejorase la apariencia facial.

Lo que ocurre, como explica a Maldita.es la dermatóloga estética Inés Escandell, maldita que nos ha prestado sus superpoderes, es que la gran mayoría son estudios de baja calidad: no solo presentan un reducido número de participantes, sino que analizan intervenciones que no son homogéneas (ejercicios puntuales durante más o menos minutos a lo largo de más o menos semanas) y carecen de grupos de control (otro grupo de individuos que no realizase los ejercicios y a los que se hiciese seguimiento para detectar diferencias entre unos y otros).

Estas son las conclusiones a las que llega un metaanálisis (un método para sintetizar los resultados de los estudios en relación a un tema concreto) publicado en la revista Aesthetic Surgery Journal en 2014 sobre la bibliografía hasta el momento. Añade, además, que en la mayoría de los casos, las evaluaciones sobre si los ejercicios habían sido o no efectivosfueron puramente subjetivas, realizadas por los autores y/o los propios pacientes, sin enmascaramiento”.

“Al final, lo que concluyen casi todos los estudios es que [los ejercicios faciales] podrían mejorar de forma muy leve el aspecto del envejecimiento facial (nada que ver al resultado de otros tratamientos que se realizan en consulta)”, indica Escandell. Hablamos, además, de rutinas de unos 30 minutos que deben practicase diariamente o cada dos días durante, al menos, 20 semanas, no solo unos cuantos segundos frente al espejo en un momento determinado. Y, aun así, los resultados serían leves, como menciona Escandell. Según este estudio de 2018, tras estas 20 semanas de ejercicios, la media de edad estimada al inicio se reducía tan solo de 50 a 48 años, lejos de esa década de diferencia de la que alardean muchos contenidos en redes.

Además, en palabras de la dermatóloga, “no se puede afirmar de forma definitiva que esta mejoría exista”, al no haberse comparado los resultados en los participantes que llevaron a cabo los ejercicios con participantes que no los practicaron.

Por todo esto, no se puede asegurar rotundamente que estas rutinas mejoren significativamente el envejecimiento, como lo hacen estas webs y contenidos: “Esto no es cierto, no se puede hacer esa afirmación con tal rotundidad. ¿Que hacer ejercicios faciales mejore [la apariencia de la piel]? Puede, incluso por el efecto de la relajación. Pero no se puede afirmar ni prever qué resultados vamos a conseguir, porque no hay datos en estudios de calidad”, concluye la experta.

Una última cosilla...

Antes de decir adiós, os recordamos una vez más: no somos médicos, somos periodistas. Puedes contar con nosotros para todo aquello que esté en nuestra mano, ¡por supuesto! Pero si lo que necesitas es un diagnóstico concreto y/o tienes dudas médicas específicas, la mejor opción será que recurras a un profesional sanitario que estudie el caso y te recomiende la solución o tratamiento más adecuado. ¡Gracias por leernos y buen fin de semana!

En este artículo ha colaborado con sus superpoderes la malditas Inés Escandell, dermatóloga.

Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.