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¿Memoria de pez o memoria de elefante? Mitos, datos y estudios científicos sobre la memoria de estos animales

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Si has visto las películas de animación ‘Buscando a Nemo’ y ‘Buscando a Dory’ (Dory, que es un pez cirujano azul, casi no tiene memoria a corto plazo en la película) lo habrás escuchado: los peces tienen una memoria muy corta, de sólo unos segundos. De ahí la expresión “tener memoria de pez”. La sabiduría popular dice que pasa lo contrario con los elefantes. Tener una memoria de elefante es tener una capacidad memorística memorable, ser capaz de no olvidar nada. Mientras que es un mito que los peces no tengan memoria más allá de unos segundos, sí es cierto que los elefantes tienen muy buena memoria. Lo explicamos.

Recuerdos de meses en los peces

Primero hay que aclarar que lo que llamamos peces es en realidad un conjunto muy amplio y variado de especies, por lo que es difícil generalizar sobre una categoría tan diversa. Pero un estudio con cíclidos africanos (Labidochromis caeruleus), un pez endémico del lago Malawi, encontró que estos animales pueden recordar asociaciones hasta 12 días después.

En la investigación, cada pez fue entrenado para entrar en una zona del acuario para recibir la recompensa de comida. Después de tres días con varias sesiones de entrenamiento de 20 minutos, se les dio 12 días de descanso y se les reintrodujo en su área de entrenamiento. Los investigadores vieron que los cíclidos preferían la zona asociada con el premio de comida, lo que sugiere que recordaron las experiencias anteriores del entrenamiento

“Los peces pueden recordar los tipos de presa durante meses, pueden aprender a evitar a los depredadores tras ser atacados una vez y conservan esa memoria durante varios meses. Y las carpas que han sido capturadas por los pescadores evitan los anzuelos durante al menos un año. Que los peces sólo tengan una memoria de tres segundos es una tontería", explicó en 2010 Kevin Warburton, investigador especializado en el comportamiento de los peces de agua dulce de Australia del Instituto de Tierra, Agua y Sociedad de la Universidad Charles Sturt de Australia.

Estos animales pueden reconocer a otros individuos y modificar su propio comportamiento tras observar las interacciones entre otros individuos, aclaró Warburton: “Por ejemplo, los peces luchadores siameses (Betta splendens) atacarán a otros miembros de su misma especie de forma más agresiva si les han visto perder competiciones con otros luchadores”.

Confirmado: los elefantes tienen buena memoria

Si los peces tienen capacidad de recordar pese al mito, resulta que los elefantes sí cumplen con la sabiduría popular. En el año 2000, un estudio científico encontró que elefantes africanos hembras (Loxodonta africana) en libertad reconocían sonidos en baja frecuencia emitidos por familiares que abandonaron el grupo hasta 12 años antes y mostraban diferentes reacciones si las llamadas de otros individuos eran conocidos suyos o no tenían relación con ellos. Los autores estimaron que las elefantas son capaces de reconocer y recordar los sonidos de llamadas de unos 100 individuos distintos de su misma especie.

Pero los elefantes también tienen capacidad para reconocer y recordar los sonidos de posibles amenazas como son los seres humanos. Una investigación publicada en 2014 concluyó que los elefantes africanos pueden determinar la etnia, el género y la edad de las señales acústicas de humanos. El trabajo se realizó en el Parque Nacional de Amboseli de Kenia donde los paquidermos conviven con dos pueblos: los masái y los kamba. 

Mientras los masái tienen conflictos habitualmente con los elefantes por el acceso al agua y pasto para su ganado, el estilo de vida agrícola de los kamba supone una menor amenaza para estos animales. Los investigadores descubrieron que los elefantes tendían más a adoptar actitudes defensivas ante voces masculinas de masái que de hombres kamba. Además, ese comportamiento de alerta era menor ante mujeres y niños masái que hacia los hombres de ese pueblo africano, lo que indica que también tienen en cuenta la edad y el género para considerar el nivel de riesgo en que se encuentran ante los humanos.


Primera fecha de publicación de este artículo: 05/10/2021

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