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La homosexualidad es legal en España desde el año 1978. Ese año se derogó un artículo de la ley franquista de Peligrosidad Social que decía que “serán declarados en estado peligroso, y se les aplicarán las correspondientes medidas de seguridad y rehabilitación, quienes realicen actos de homosexualidad”.
El CIS incluyó dos años después, en 1980, la primera pregunta relativa a personas homosexuales: fue en una encuesta exclusiva para psiquiatras en la que se les preguntaba si estaban de acuerdo o no con distintas frases relativas a la homosexualidad.
Este año casi 3 de cada 4 psiquiatras encuestados opinaba que “en ningún sentido debe ser perseguida” la homosexualidad. El 64,2% dijeron que era “una opción libre y respetable”, y el 61,5% que era “una sexualidad distinta de la de la mayoría”.
Sin embargo, ese año todavía había 5 de cada 10 psiquiatras que veían la homosexualidad como una “patología a la que hay que tratar como a otra cualquiera” y como “un problema de aprendizaje”. Como ya explicamos en Maldita.es, la homosexualidad apareció primero como un trastorno y luego como un desorden sexual para la American Psichiatry Association (APA) hasta 1987, año en el que esta asociación dejó de incluirla en su listado. La Organización Mundial de la Salud necesitó hasta 1990 para eliminarla de su Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y otros Problemas de Salud.
En 2004 fue la última vez que el CIS volvió a hacer preguntas parecidas sobre cómo veían los españoles (esta vez todos, no sólo psiquiatras) la homosexualidad. En esta ocasión, todavía el 13,3% de los entrevistados opinaban que la homosexualidad era una enfermedad. Desde entonces el CIS no ha vuelto a hacer esta pregunta, por lo que no podemos saber si los españoles hemos seguido avanzando en nuestra percepción de las personas homosexuales.
