No es la primera vez que en Maldita.es os hablamos de cuentas trols que mueven “contenido feminista” para hacerse pasar por seguidoras del movimiento y desacreditarlo con mensajes controvertidos. Estas cuentas, que se definen en sus biografías como “feministas”, “antifascistas”, “socialistas”, “de izquierdas” o “republicanas”, siguen el mismo modus operandi continuamente: publican mensajes esperpénticos y llevados al extremo y cuando Twitter las localiza y suspende sus perfiles, vuelven a aparecer con otros para continuar intoxicando el debate.
Son ya varias las cuentas trols que hemos localizado y de las que os hemos hablado y una de ellas es @chusmariquilla. Desde Maldita.es hemos analizado este usuario para comprobar los mensajes que publica. Os contamos por qué es una cuenta trol.
Utiliza imágenes en su perfil que no son suyas
El perfil @chusmariquilla se define en Twitter como “jubilada, de izquierdas y de Madrid”. Añade que es “feminista, transgénero no binaria, de Podemos y, por ello, tolerante y empoderada”. Sin embargo, si analizamos las fotos que publica en sus mensajes, vemos que utiliza imágenes que no son suyas. Por ejemplo, en uno de sus tuits afirma que “se ha roto un hueso fascista de la mano, una Falange” (sic) y para mostrarlo publica una foto que, como podemos comprobar a través de una búsqueda inversa de Google, lleva circulando en blogs de internet desde mayo del año 2016.
Aprovechando la crisis migratoria vivida en Ceuta desde el pasado 17 de mayo, también ha publicado tuits asegurando que “acoger a un mena es feminista y biodegradable” y señala que “acogió a un grupo de lo más noble”. En realidad, la imagen que acompaña el tuit es del año 2014, cuando el grupo terrorista Daesh capturó a un piloto jordano en Siria.
Respecto a su foto de perfil, en Maldita.es ya os hemos explicado cómo las cuentas trols utilizan aplicaciones móviles como FaceApp para manipular imágenes. En este caso, si hacemos una búsqueda inversa de imágenes de la foto de perfil de @chusmariquilla no tendremos resultados. Sin embargo, si ampliamos y observamos bien la imagen, podemos ver una serie de desperfectos, borrones y malos recortes que indican que la captura ha sido manipulada.
La cuenta ha sido creada recientemente
Otros de los puntos en los que debemos fijarnos para identificar estos perfiles trols es su fecha de creación. A través de la herramienta Twopcharts.com comprobamos que este usuario no supera los siete meses en la red social y creó su cuenta en noviembre de 2020.
Los trols interactúan entre ellos
Como siempre decimos, las cuentas trols suelen interactuar entre ellas para proporcionar más visibilidad a sus mensajes. Si analizamos este perfil a través de la herramienta Twitonomy, comprobamos cómo cuenta con interacciones con otras cuentas trols de las que ya os hemos avisado con Maldita.es, como @OlegariaPodemos (ahora @Olegaria5364) o la ya suspendida @Viuda_Morata (antes @adela_Zapatones). También en su propio perfil vemos otros perfiles trols como @tonigomezpe.
Aunque los trols son más difíciles de identificar que las cuentas parodia o fake, ya os hemos alertado de algunos de estos perfiles. Para identificarlos, Marcelino Madrigal, experto informático en análisis de redes, señala que se pueden seguir una serie de consejos como observar la fecha de creación del perfil, sospechar si tuitean constantemente y en el mismo horario o fijarse en las listas de Twitter a las que pertenecen. También en declaraciones a Maldita.es, Carmela Ríos, periodista especializada en redes sociales, sostiene que "la buena noticia es que cada día son más identificables y hay más usuarios que están más preparados para detectarlos".
Trols machistas que se hacen pasar por feministas para colártela
En Maldito Feminismo también hemos recopilado algunas de las cuentas trols machistas que mueven contenido llevado al extremo para ridiculizar y burlarse del movimiento feminista. Algunos de estos perfiles son @Insumisiones, @EnfurecidaMujer o @Rencorosa3. Estos usuarios se hacen pasar por seguidoras del movimiento a favor de la igualdad y lanzan bulos en nombre del feminismo como que "el ajedrez o la mortadela son machistas", que "preguntar la hora a una mujer es una muestra de superioridad y opresión" o que "comer miel es machismo por ser producida por abejas obreras cuyo trabajo es expropiado".