“Franco, tras la riada del 57, ordenó construir el nuevo cauce, junto a una serie de pantanos y embalses que contuvieran el agua de estos fenómenos. Este Gobierno ha demolido 4 de estos pantanos y aquí tenemos el resultado”. Un mensaje en redes indica que el impacto de la DANA del 29 de octubre de 2024 ha sido mayor debido a la demolición de cuatro embalses en València construidos junto al nuevo cauce del río Turia tras una riada en 1957.
Es cierto que tras la riada en 1957 se ordenó reconducir el cauce del Turia y la construcción del embalse de Loriguilla, que sigue funcionando. Pero no es cierto que se hayan demolido embalses: las infraestructuras demolidas son azudes y pequeñas presas obsoletas que se pueden consultar en visores y geoportales del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) y que no están construidos para embalsar agua. Además, los expedientes de todas estas infraestructuras derribadas comenzaron antes del Gobierno de Pedro Sánchez, que tomó posesión en 2018.
Infraestructuras derribadas en la provincia de Valencia: azudes y pequeñas presas
Las únicas infraestructuras demolidas en la provincia de Valencia que aparecen en el geoportal del MITECO son el azud del Corindón en 2017, en el cauce del Turia, que tenía una altura de 1,50 metros y tenía un uso de generación de energía; y cinco infraestructuras en la Rambla de L’Algoder en 2006, que tenía un uso de riego y se derribaron para dar cumplimiento a un expediente sancionador.
Fuera de la provincia pero en el cauce del Turia también se derribó el azud de Carburos en 2017, en la provincia de Teruel, para generación de energía y con una altura de dos metros. Por último, limítrofe con la provincia de Albacete se demolió en 2015 un aprovechamiento de 7,35 metros en el río Cabriel, que tenía uso energético. También está por derribar un pequeño azud fronterizo entre Cuenca y Valencia, junto a la presa de Contreras, aunque este aún no aparece en este geoportal del MITECO.
En definitiva, no se han demolido “pantanos y embalses” en la provincia de Valencia. Las infraestructuras derribadas son azudes y pequeñas presas que tenían un uso de generación de energía y regadío en los años 2006, 2015 y 2017.