En ocasiones hablamos de gases de efecto invernadero y gases contaminantes como si fueran sinónimos ¿Esto es correcto? Aunque no sean exactamente lo mismo, sí que podemos hablar de gases de efecto invernadero como ‘contaminantes’, según los expertos consultados por Maldita.es.
Los gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO2) y el metano (CH4), son los que contribuyen al calentamiento global. Por su parte, los gases contaminantes son aquellos que, al liberarse en el aire, pueden tener efectos nocivos o producir daños para la salud, seguridad o bienestar humano o el medioambiente en su conjunto, según la Dirección General del Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid. Aunque los gases de efecto invernadero no son nocivos de forma directa para la salud, pueden considerarse contaminantes por su efecto dañino en los ecosistemas.
Así lo explica a Maldita.es la química especializada en contaminación ambiental e investigadora del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC) Pilar Fernández. “Los gases de efecto invernadero son sustancias naturales, pero las actividades humanas han aumentado significativamente su concentración en el medio, lo que está afectando negativamente al funcionamiento de los ecosistemas y esto implica también efectos sobre los organismos, incluido el ser humano”, señala. Por lo tanto, para Fernández todos los gases de efecto invernadero pueden considerarse contaminantes.
Eso sí, aunque el CO2 no se considera un contaminante cuando se mide la calidad del aire exterior y no se controla en las estaciones de control de la calidad del aire, el CO2 en interiores sí que es un parámetro importante de calidad del aire porque unas concentraciones altas indican falta de ventilación, aclara a Maldita.es Ioar Rivas, ambientóloga especializada en exposición a contaminación atmosférica y efectos en la salud e investigadora posdoctoral en el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal).