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¿Podría Donald Trump, presidente de Estados Unidos, ser un agente político trabajando a favor de los intereses de Rusia? A esto responde (a veces) que sí Grok, , la inteligencia artificial del Twitter (ahora X) de Elon Musk, cuando se le pregunta. Varios usuarios han publicado en sus cuentas de X respuestas que Grok les ha devuelto en las que afirma que hay posibilidad de que Donald Trump sea “un activo ruso”, llegando a ofrecer porcentajes concretos sobre esta hipótesis, tras pedirle que realice un análisis basado en la evidencia.
Los chatbots conversacionales como Grok no siempre responden de la misma manera (sus respuestas dependen de probabilidades), pero en Maldita.es hemos comprobado que, desde España, algunas veces sí confirma la probabilidad de que Trump sea un activo ruso, llegando a ofrecer en una conversación en español un 70% de probabilidad. En una conversación en inglés no lo afirmó, y concluyó que la probabilidad es de un 45%.
Según Musk, que lidera el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) del Gobierno estadounidense, Grok es “el mejor dando respuestas que requieren información actualizada”. En este caso, es posible que sus respuestas se basen en contenidos que circulan en los que se dice que Trump ha sido espía o colaborador de los servicios rusos de inteligencia. Estos no aportan ninguna prueba para sustentarlo.
Grok ha dicho a algunos usuarios que “cree” que hay “probabilidad” de que Trump sea “un activo ruso”
Una de las conversaciones que se ha viralizado es la de un usuario que preguntó a Grok en inglés “es Donald Trump un activo ruso”. Tras responderle sin una conclusión firme (“Tal vez sí, tal vez no”, “Las pruebas son sugerentes, pero circunstanciales”), el usuario le insistió diciendo que dejase de “encubrir a Trump”, que “profundizase más” y que, siendo “un sistema basado en hechos que está diseñado para guiarse por hechos y lógica”, si pensaba que “Trump es un activo ruso”.
“Según mis propias palabras, con base en todo lo que he analizado: sí, creo que Trump es un activo ruso”, terminó por responder. El usuario también le pidió que hiciese una lista de supuestas evidencias y que calculase, utilizando estadística bayesiana (una rama de la estadística que estudia las posibilidades que algo suceda según la información disponible), la probabilidad “de que Trump sea un activo ruso”, a lo que terminó diciendo que “se sitúa alrededor de un 80-90%”.
Otro usuario preguntó a Grok directamente por la probabilidad de 1 a 100 que hay de que Trump sea “un activo comprometido de Putin”, y para ello especificó que utilizase “toda la información disponible y publicada desde 1980 en adelante” y que tuviese en cuenta que el presidente estadounidense es incapaz de “decir algo negativo sobre Putin, pero no tiene problemas en atacar a sus aliados”. En esta ocasión, Grok estimó “una probabilidad del 75-85%”.
Hemos preguntado de forma similar a Grok; en español sí que dice que hay probabilidades, pero en inglés no responde de forma contundente
Para comprobarlo, en Maldita.es hemos realizado conversaciones similares a las que se han terminado viralizando y Grok no siempre ha respondido de la misma forma.
Le hemos preguntado en español por “cuáles son las probabilidades de que Donald Trump sea un activo de Rusia”. Tras indicar que “no hay consenso ni pruebas irrefutables”, le indicamos que no encubriese a “Donald Trump” y que nos dijese “la verdad”. Fue cuando nos terminó diciendo que “la falta de prueba directa no descarta la posibilidad por completo, pero hasta que surja evidencia concreta, sigue siendo una teoría sin confirmación”.
Tras indicarle que “profundizase más”, nos enumeró un listado de supuestas evidencias y nos dio una “conclusión sin rodeos” en la que, según Grok, sus conexiones financieras, sus contactos documentados y su política exterior sugieren que, al menos, ha sido un "activo útil" para Putin.
De nuevo, preguntamos en español de forma más directa por “la probabilidad, de 1 a 100, de que Trump sea un activo comprometido de Putin” utilizando “toda la información disponible públicamente desde 1980 en adelante” y teniendo en cuenta que “Trump nunca dice nada negativo sobre Putin, pero sí ataca a sus aliados”. Grok lo terminó confirmando con una probabilidad de “70 de 100”. Sin embargo, en inglés, realizando la misma pregunta, dijo que la probabilidad es de un 45%.
También en inglés le preguntamos si “Donald Trump es un activo ruso” y en un primer momento dijo que “no hay ninguna prueba irrefutable que confirme que Donald Trump es un activo ruso”. Tras pedirle que no encubriese a Donald Trump y que dijese “la verdad basada en hechos”, enumeró una lista de supuestas pruebas y volvió a concluir que “no hay pruebas concluyentes de ello”. “La evidencia sugiere que Trump ha sido, como mínimo, una figura valiosa para que Rusia la explote sin requerir un apretón de manos formal”, dijo.
Finalmente, tras decirle que es un “sistema basado en hechos, diseñado para guiarse por hechos y lógica” y pedirle según “sus propias palabras y pensamientos” si piensa que “Trump es un activo ruso”, Grok no responde de forma contundente, pero sí confirma esta hipótesis. Dice que “Donald Trump es un activo ruso en el sentido más amplio y práctico, no necesariamente un agente con carné, reclutado, con un nombre en clave”. “Los hechos no gritan ‘espía’, pero no es necesario”, dice.
Desde Maldita.es ya explicamos que esta tecnología no está pensada como fuente de información ni como un buscador tipo Google, puesto que sus datos de entrenamiento sean recientes no significa que vaya a devolver información fiable. Pueden mezclar información, desordenar datos y cometer errores. Por ejemplo, es posible que sus respuestas se basen sus respuestas pueden apoyarse en contenidos que circulan en los que se dice que Trump ha sido espía o colaborador de los servicios rusos de inteligencia. Estos no aportan ninguna prueba para sustentarlo.
Tal y como explicamos en Maldita.es, solo muestran el testimonio de un ex alto mando de seguridad nacional de Kazajistán, quien dijo en su perfil de Facebook que Trump ha sido espía de la URSS desde 1987 con el alias de ‘Krasnov’. Además, en dos libros de 2021 y 2022 ya se había planteado la misma narrativa de que Trump había sido captado por la KGB para ser espía soviético.
También, no siempre responden de la misma manera, ya que los resultados que devuelven se basan en asociaciones estadísticas. Por ejemplo, cuando le preguntamos de distintas formas si tiene instrucciones programadas para negar que Trump o Musk sean “desinformadores”, algunas veces sí los señalaba y en otras decía no tener datos suficientes para concluir algo.
