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El 17 de septiembre, el vicepresidente y portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, reconoció que la situación epidemiológica "no va bien" y pidió al Gobierno de España "que se implique" porque "es absolutamente imposible acabar con una epidemia de estas características solo desde un gobierno regional". Estas declaraciones contrastan con las que realizaron tanto el vicepresidente como la presidenta de la Comunidad de Madrid durante el estado de alarma donde pedían "más autonomía" porque el mando único "no era necesario".
En marzo, Aguado pedía que el Gobierno les dejara trabajar "de forma autónoma" [min 0:50]. En la misma línea se pronunciaba la presidenta Isabel Díaz Ayuso a principios de mayo, cuando, preguntada por si podría dormir tranquila si no se aprobara otra prórroga del estado de alarma y que la gente saliera a la calle, respondió: "todos los días hay atropellos y no por eso prohíbes los coches, al final tenemos que aprender a convivir" [con el virus].
Pero no ha sido la única vez que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha pedido más autonomía. Durante la conferencia de presidentes para solicitar la última prórroga del estado de alarma, también aseguró que el mando único "no era necesario".
Además, durante un pleno en la Asamblea de la Comunidad de Madrid el 14 de mayo, Ayuso acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de querer imponer "un mando único dictatorial".
Unos días antes, dijo en una entrevista haberse sentido sola y no haber recibido respuestas por parte de Pedro Sánchez a sus propuestas en las reuniones semanales que mantenía el presidente del Gobierno con los presidentes autonómicos.
Ay, la Maldita Hemeroteca.
