Las claves:
La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género es el organismo que elabora y difunde la información sobre mujeres víctimas mortales por violencia de género desde el año 2003.
Aunque su creación fue en 2006, recaban los datos con carácter retroactivo desde 2003 hasta 2005 gracias a la información de los Cuerpos de Seguridad, órganos judiciales y Fiscalía para incluir las cifras de mujeres asesinadas por violencia de género en los términos que indica la ley.
El Instituto de la Mujer y el INE publican datos sobre mujeres asesinadas por violencia de género entre 1999 y 2002 con datos de Interior y notas de prensa, como no es el mismo tipo de dato no se puede cruzar.
Los datos del Ministerio del Interior en los que se basa la estadística del INE no son comparables porque sólo contabilizaban a las mujeres asesinadas por sus maridos, sin tener en cuenta exparejas o novios; y se elaboraban a partir de atestados.
El primer dato oficial sobre el número de mujeres asesinadas por violencia de género es el del año 2003. La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, dependiente del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, es quien elabora y difunde información agregada sobre los casos de mujeres víctimas mortales por violencia de género en los términos que define la Ley Integral contra la Violencia de Género. Es decir, la información relativa a las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas varones.
Este organismo ha contabilizado cada víctima con carácter retroactivo desde el año 2003 gracias a las fichas anonimizadas de cada víctima mortal por violencia de género que tienen las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, los órganos judiciales y la Fiscalía.
Las cifras de mujeres asesinadas en el ámbito familiar entre 1997 y 2006 que hay disponibles tanto en el Instituto de la Mujer como en el Instituto Nacional de Estadística (INE) o en los diferentes anuarios estadísticos del Ministerio del Interior no son comparables con las cifras posteriores porque no muestran la misma información. Tanto el Instituto de la Mujer y como el INE se basan en datos del Ministerio del Interior y en notas de prensa pero Interior, hasta el año 2002, sólo recogía la información de mujeres víctimas mortales dentro del matrimonio, sin tener en cuenta las mujeres asesinadas por sus parejas si no estaban casados o por sus exparejas. Por lo tanto, las estadísticas son diferentes y los datos que se muestran no se pueden cruzar.
El Instituto de la Mujer publica las cifras de mujeres asesinadas por violencia de género desde 1999 gracias a dos fuentes diferentes: entre 1999 y 2005, con la información recogida por el Ministerio del Interior y a partir de información de prensa; y desde 2006, los datos proceden de la Delegación del Gobierno. Lo mismo que ocurre con los datos publicados por el INE entre esos años.
Interior no consideraba a las víctimas mortales asesinadas en el ámbito de la pareja o expareja que no fueran dentro del matrimonio hasta el año 2002
Por su parte, el Ministerio del Interior tiene pública información sobre el número de homicidios y asesinatos de personas cuyo autor es el cónyuge hasta el año 2006, cuando la Delegación del Gobierno para la violencia de género empezó a elaborar sus estadísticas. Hay que tener en cuenta además que, hasta 2002, la información publicada en los anuarios estadísticos de Interior no tenía en cuenta todo lo que a día de hoy consideramos violencia de género ya que sólo incluían a las mujeres muertas a manos de sus maridos, o sea, dentro del matrimonio. Se dejaban fuera de esta estadística a aquellas mujeres asesinadas por sus novios, parejas de hecho, exnovios, divorciados, separados, etcétera.
Los anuarios estadísticos del Ministerio del Interior se basaban en atestados policiales: si la mujer no moría en el momento de la agresión, no se incluía en la estadística
Además, a esta falta de datos en las estadísticas de Interior, se añade que la información que publicaban estaba basada en atestados policiales. Es decir, si la esposa moría en el acto sí que se consideraba como crimen en el ámbito familiar pero si no, no se incluía en la base de datos de Interior porque, tal y como nos confirman desde el ministerio, “no hay un seguimiento posterior de los casos, es lo que ve el policía en cuestión que hace el atestado: ¿hay una persona muerta o no?”. Por ejemplo, si la esposa moría a los dos días de la agresión del marido, ya no se incluía en esta estadística.
No podemos saber qué notas de prensa han tomado como referencia desde el Instituto de la Mujer y desde el INE y se si han ajustado a lo que dice la Ley Integral contra la Violencia de Género que es violencia de género
¿Qué significa esto? Que los datos que manejaba Interior hasta el 2002 son sólo una parte de los asesinatos que había en aquella época y que no podemos tomar como referencia los datos publicados entre 1999 y 2003 por el INE y el Instituto Nacional de Estadística en aquellos años porque están basados en las estadísticas de Interior.
Es cierto que el Instituto de la Mujer y el INE, además, incorporan datos procedentes de noticias publicadas en medios de comunicación pero no especifican qué noticias son las que han recopilado para cumplimentar la estadística y, por lo tanto, tampoco podemos saber qué selección de víctimas han hecho, si se han ajustado a lo que define como víctima por violencia de género la Ley Integral de Violencia de Género o si han dejado de contar a alguna mujer.
De hecho, desde el Ministerio del Interior nos han explicado que “a partir del año 2006 dejan de publicarse [las cifras de mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas] porque se consideró que había otros datos mucho más descriptivos que los de violencia en el ámbito familiar que incluía Interior.
En este sentido, también la directora de la Fundación Mujeres, Marisa Soleto, explica que “hasta el 2003, había grandes diferencias entre el número de mujeres [víctimas mortales por violencia de género] que recogían los organismos oficiales con el de que recogían las organizaciones de mujeres”. Por ello, desde el año 1999, junto a otras organizaciones, comenzaron a elaborar estadísticas “oficiosas”, como ella misma define, gracias a los datos de Interior y los que extraían de las noticias publicadas por los medios de comunicación “y que mostraban los asesinatos y homicidios de mujeres a manos de sus parejas o exparejas, no sólo por parte de sus maridos”, continúa Soleto.
Sus propias estadísticas se pueden consultar en el informe sobre violencia contra las mujeres en España que está disponible en su página web pero, de nuevo, los datos no coinciden con los que publica el Instituto de la Mujer y el INE. A pesar de que los dos organismos y la Fundación Mujeres se basan en las mismas fuentes: estadísticas del Ministerio del Interior y notas que publican los medios de comunicación.
Por ello, ante la falta de rigurosidad en la recogida de datos de los diferentes organismos, el desconocimiento de las noticias que han incluido en sus recopilaciones de víctimas mortales y que no podemos saber si se han basado en lo que la Ley Integral contra la Violencia de Género dice qué es violencia de género, no se puede considerar oficial ningún dato publicado con anterioridad al 2003.