“¿Os sorprendería saber que la mayoría de vasos de cristal que utilizamos son de vidrio y no de cristal?”, pregunta Ecoembes. Entre los errores más frecuentes a la hora de reciclar está el de confundir el vidrio con el cristal. Pero estos materiales no tienen la misma composición y tampoco se reciclan de la misma forma. Mientras que el vidrio debe desecharse en el contenedor verde, el cristal no se puede reciclar y tiene que tirarse al de color gris. Os explicamos cómo distinguir ambos materiales.
¿En qué se diferencian el cristal y el vidrio?
“A pesar de que muchas veces se utilizan las palabras cristal y vidrio como sinónimos, en realidad, son compuestos muy diferentes”, cuenta a Maldita.es Enrique Vegas, experto en fabricación de vidrio y maldito que nos ha prestado sus superpoderes.
Tal y como indica Ecoembes, el cristal es un sólido perfecto que contiene óxido de plomo, un compuesto que posee una estructura atómica regular. Es decir, “al tener sus componentes “ordenados”, da lugar a formas definidas y simétricas”. Este material es creado por la naturaleza a través de la cristalización de gases.
Sin embargo, el vidrio presenta una estructura irregular. Vegas explica que este material se fabrica a partir de sílice y, en menor medida, de carbonatos, dolomía (una roca sedimentaria de origen químico) y otros elementos en función del uso que se le vaya a dar al envase.
El vidrio, según el experto, se suele usar para fabricar vasos, platos, frascos para perfumería y cosmética, ventanas o escaparates. Casi todas las vajillas están hechas de vidrio, así como los envases de alimentación (conservas, tomate frito, paté, encurtidos,mermeladas, miel...), botellas (agua, vino, vinagre...) y tarros. Las copas normalmente son de cristal, aunque también hay algunas de vidrio.
El truco para diferenciar el cristal del vidrio
Hay un truco para salir de dudas y diferenciar estos dos materiales. Miguel Ángel Muñecas Vidal, químico especialista en sostenibilidad y maldito que nos ha prestado sus superpoderes, explica a Maldita.es que “el cristal tiene una estructura ordenada”. “Eso marca una gran diferencia y nos permite distinguirlo muy fácilmente del vidrio porque la transmisión del sonido es diferente”, afirma.
Para comprobar si una copa o un vaso es de cristal o de vidrio, basta con acercarlo al oído y darle un golpecito. “El vidrio transmite fatal y se oye un clic apagado, muy corto”, cuenta el experto.
El cristal, por el contrario, tiene “una sonoridad limpia, muy peculiar y armónica, además de una resonancia alargada en el tiempo”. En este caso, el sonido suena similar a un "cliiiiiiinc". A ello se suma que, tal y como indica Ecoembes, las copas de cristal suelen ser más pesadas, transparentes, finas y delicadas que las de vidrio.
¿Dónde hay que tirar los objetos de vidrio y de cristal?
El vidrio es 100% reciclable, según Ecoembes: “Es decir, se puede fundir de nuevo sin perder cantidad ni calidad”. Para ello, hay que tirarlo en el contenedor verde. El cristal, en cambio, no puede reciclarse.
“El óxido de plomo que contiene necesita una temperatura de fundición mucho mayor que la del vidrio, por lo que no se puede fundir en los mismos hornos”, cuenta la organización. Los objetos de este material deben tirarse en el contenedor gris o, si son muy grandes (por ejemplo, en el caso de las ventanas y los espejos), en un punto limpio.
En Maldita.es también os hemos contado cómo reciclar tests de embarazo, cápsulas de café, la chapa de las botellas de vidrio, mascarillas, árboles de Navidad y las baterías de litio de los coches eléctricos.
En este artículo han colaborado con sus superpoderes Enrique Vegas y Miguel Ángel Muñecas Vidal.
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