A finales de julio de este 2022 comenzaron a circular en redes sociales contenidos que aseguraban que el Ministerio de Igualdad había gastado 84.500 euros en el cartel de su campaña ‘El verano también es nuestro’. Estos mensajes iban acompañados de una captura del expediente de una licitación que concedía este presupuesto a la empresa The Tab Gang S.L. “para el diseño de la creatividad y la producción de una campaña de sensibilización contra los estereotipos de género basados en los cánones de belleza femeninos”. Pero es un bulo que el cartel costara esta cantidad y que The Tab Gang S.L fuera la empresa encargada de elaborarlo.
Como ya te explicamos, tanto el Ministerio de Igualdad como la empresa adjudicataria afirmaron que la cuantía asignada a este proyecto no está relacionada con la campaña ‘El verano también es nuestro’. Ahora hemos obtenido, vía ley de transparencia, una copia de la propuesta de autorización de gasto del proyecto que demuestra que el presupuesto destinado al diseño y creación del mencionado cartel fue de 4.990 euros, impuestos incluidos, y en el que no se hace referencia a la empresa The Tab Gang S.L. como responsable de la elaboración del mismo.
La campaña ‘El verano también es nuestro’ costó 4.990 euros, según consta en la propuesta de autorización de gasto del proyecto a la que Maldita.es ha accedido vía transparencia
El Ministerio de Igualdad afirmó ya en julio a Maldita.es que el coste de la campaña ‘El verano también es nuestro’, impuestos incluidos, había sido de 4.990 euros. Del mismo modo, María Antonia Morillas, directora del Instituto de las Mujeres, explicó a través de Twitter que era “absolutamente falso” que la ilustración principal de la mencionada campaña hubiese contado con un presupuesto de más de 84.000 euros y repitió que a ella se habían destinado 4.990 euros.
También Arte Mapache, la empresa a cargo del cartel de la campaña, aseguró que “hizo este cartel por un coste de 4.490 euros (cifra que no coincide con la reflejada en la propuesta de autorización de gasto, de 4.990 euros)” y que era “falso que haya cobrado 84.000 euros”.
Maldita.es realizó una solicitud de acceso a la información, vía ley de transparencia, al Ministerio de Igualdad, con fecha 29 de julio de 2022, en la que preguntamos por el procedimiento, el importe, la fecha en la que se suscribió y el plazo de ejecución de la campaña ‘El verano es nuestro’ y en la que se solicitó también una copia del contrato firmado con la entidad adjudicataria para la elaboración de la campaña.
En la respuesta a la misma, Igualdad señala lo siguiente: “La contratación del diseño del cartel “El verano también es nuestro”, se ha tramitado por un procedimiento de anticipo de Caja Fija, por ser su importe inferior a 5.000 euros, de acuerdo con lo regulado en el Real Decreto 725/1989, de 16 de junio, sobre anticipos de Caja fija, a través de la aplicación presupuestaria 30.101.232B-227.06”.
Asimismo, en la propuesta de autorización de gasto adjunto se especifica que se destina un importe total de 4.990 euros impuestos incluidos, como también han comprobado en Newtral, para una propuesta del Instituto de las Mujeres que consiste en el “diseño de un cartel de 50x70 cm y su adaptación al entorno digital: home y rrss del organismo, para una acción de sensibilización y fomentar una imagen equilibrada y no estereotipada de la imagen de las mujeres”.
Por tanto, no es cierto que el Ministerio de Igualdad haya gastado más de 80.000 euros en el cartel de la campaña ‘El verano es nuestro’, lanzada en julio de 2022. El presupuesto de esta acción publicitaria fue de 4.990 euros, como se puede ver en los contratos de adjudicación de la misma, en los que no se refleja que The Tab Gang S.L fuera la empresa adjudicataria del proyecto.
La autora de la campaña reconoce “haberse inspirado” en fotografías de modelos y no haber pagado la licencia de la tipografía utilizada
En los días posteriores a la publicación de la campaña del Ministerio de Igualdad modelos como Nyome Nicholas o Raissa Galvão denunciaron en sus redes que el Ministerio había usado imágenes suyas sin su consentimiento, llevando a la empresa encargada de la elaboración del cartel a pedir disculpas públicamente.
La compañía, Arte Mapache, admitió “haberse inspirado en sus fotografías para la campaña” y consideró que “la mejor forma de paliar los daños que se hayan podido derivar de esta conducta es repartir los beneficios que se derivan de este trabajo a partes iguales entre las protagonistas del cartel”.
Asimismo, tras publicarse la campaña en redes sociales, un usuario respondió en Twitter asegurando que sabía “quién había diseñado” la tipografía que usaba la campaña y que “no tenía constancia” de que le hubieran pagado por usar su obra. Horas después, Arte Mapache reconocía en el hilo que publicó en Twitter que había “utilizado una tipografía sin licencia (pensando que era libre.) (sic.)” y señaló que se encontraba en trámites para ponerse en contacto con la empresa desarrolladora de la tipografía para comprar la licencia y “solucionarlo cuanto antes”.