Nos habéis preguntado a través de nuestro chatbot de WhatsApp (+34 644 229 319) por un contenido que se mueve en esta y otras plataformas, como Facebook, y que propone la yuca, un tubérculo comestible, como remedio para tratar el cáncer, sin necesidad de seguir los tratamientos estipulados para tratar este tipo de enfermedad. El mensaje, que consta de la explicación de un caso concreto y en primera persona, explica que tomando 10 gramos de yuca, tres veces al día, durante un mes, la persona que escribe superó un cáncer de vejiga. Según el contenido desinformador, tras el consumo continuado de este alimento y gracias a uno de sus micronutrientes, la vitamina B17, el órgano se encontraba “completamente limpio y normal”: “Desde entonces, solo comí yuca y no continué con otros medicamentos para el cáncer”.
Sin embargo, el mensaje que transmite este contenido es falso y sus consecuencias, muy peligrosas: ni la yuca ni ningún otro alimento tiene la capacidad de curar el cáncer ni la vitamina B17 ha demostrado ser útil en tal cometido, según la literatura científica.
Este tipo de contenidos son especialmente peligrosos por la posibilidad de que interfieran en un tratamiento que sí disponga de evidencias científicas a su favor, como es el caso de la quimioterapia para tratar el cáncer (en este caso, el contenido recomienda incluso abandonarla, con las fatales consecuencias que esto puede acarrear). Es imprescindible seguir las recomendaciones del personal sanitario que conoce el diagnóstico, situación y condiciones de cada paciente y que, a partir de estos datos y con la evidencia científica en mano, establece un tratamiento adecuado en cada caso.
La sustancia a la que el texto llama 'vitamina B17' ni es una vitamina ni es útil contra el cáncer
No es la primera vez que nos preguntáis por contenidos que recomiendan el consumo de alimentos con ‘vitamina B17’ para curar el cáncer. De hecho, ha protagonizado mensajes desinformadores desde la década de 1970, algunos de los cuales ya hemos desmentido en Maldita.es.
La vitamina B17, sin embargo, no existe. La sustancia a la que se da este nombre es en realidad un compuesto llamado amigdalina o laetrilo (si hablamos de su versión purificada), que también encontramos formando parte, entre otras frutas y plantas, de las semillas de los albaricoques, las almendras amargas o el corazón de las manzanas (de hecho, es la causa por la que todos ellos tiene un regusto similar).
Al contrario de lo que afirman mensajes como este, por el que nos habéis preguntado, no hay evidencias de que la amigdalina o el laetrilo sean útiles como tratamiento anticancerígeno. Así lo señala tanto la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria de Estados Unidos (EFSA, por sus siglas en inglés), como la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) o el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos: mientras que en estudios con animales, el laetrilo mostró poca actividad anticancerígena; en los ensayos clínicos con seres humanos, no mostró actividad anticancerígena alguna.
De hecho, esta sustancia puede ser incluso tóxica. El grado depende, entre otros factores, de la forma de administración: oral (precisamente como el mensaje por el que nos habéis preguntado aconseja consumirlo) provoca más efectos secundarios que inyectado.
La causa es, como explicamos en Maldita.es, que al masticar la amigdalina, esta se transforma en cianuro. Aunque en cantidades mínimas esta sustancia no supone un riesgo, es tóxico para la salud a partir de cierta cantidad, causando náuseas, fiebre, dolor de cabeza, daño en el hígado, caída de oxígeno en la sangre y los tejidos, daños en el sistema nervioso e incluso el coma y la muerte en casos muy graves.
Nada cura "cualquier cáncer"
La cadena de WhatsApp no solo aporta la supuesta experiencia de la persona que lo escribe, su diagnóstico y superación de un cáncer de vejiga, también otras dos similares en las que los pacientes habrían superado un cáncer de próstata y otro de hígado, respectivamente. Es decir, propone el consumo de yuca como ‘tratamiento’ para todo tipo de cáncer.
Esto, como explicamos en Maldita.es, es un absoluto sinsentido científico. Aunque habitualmente hablemos del cáncer en singular, en realidad hay decenas de enfermedades distintas dentro de esta etiqueta, con distintas causas, desarrollos, tratamientos y diagnósticos. Aunque muchos tratamientos son comunes a varias o muchas de ellas, es absurdo pensar que uno solo (y mucho menos este supuesto remedio natural) sirva para curarlos todos.