Marrones y blancas. Así son las cáscaras de los huevos que se venden en muchos países. Nos habéis preguntado a qué se debe y la respuesta es fácil: esa diferencia del color se debe a la raza de la gallina que los pone y no afecta a las propiedades nutricionales del huevo.
Las gallinas de razas comerciales marrones ponen huevos de color y las gallinas blancas, huevos blancos, explica en su web el Instituto de Estudios del Huevo. “Los huevos marrones suelen tener mayor tamaño, porque las gallinas marrones son de mayor tamaño que las gallinas blancas”, añade la institución.
Lo indica también a Maldita.es Beatriz Robles, tecnóloga de los alimentos y nutricionista: “El color está determinado por la genética de la gallina y no afecta ni al valor nutritivo ni al organoléptico (características físicas como el color, sabor, textura y aroma)” pero sí que tiene cierta relevancia en la dureza de la cáscara.
Primera fecha de publicación de este artículo: 07/06/2021